Tino Lois en Santa Lynea
Tino Lois en el movimiento más duro de Definición de resistencia demócrata(Terradets)
Tino Lois lleva tiempo subido en el noveno grado. Hace más de cuatro años lograba escalar la vía más dura de su currículum, con Definición de resistencia demócrata 9a+ en Terradets, una de sus escuelas favoritas. Con el tiempo, vendría El templo del café 9a de Alquézar y la semana pasada Supernowa 9a de Vadiello.
El gallego se toma la escalada con un especial fanatismo tranquilo, que le lleva a escalar intensamente pero de forma reposada… ¿valores contradictorios? Cada uno es como es. El coruñés de 32 años nos cuenta en esta entrevista los detalles de su última realización y nos explica cómo vive actualmente su pasión por la escalada y qué objetivos de futuro tiene.
¿Cómo describirías la vía Supernowa?
Es una variante más dura de Powerade 8c+. La vía tiene dos partes diferenciadas: hasta la mitad, un problema de fuerza con buena recuperación para afrontar las secciones duras que has de pasar cómodo si quieres tener opciones de chapar reunión. Al salir de ahí, y sin descansos, un tramo de resistencia de canto romo y plano al principio y pequeño y crispante al final, con algún dinámico explosivo por el medio.
Es una vía mejor de lo que parece, ya que vista desde el suelo la línea no atrae mucho; pero al probarla la cosa cambia. Me pasó lo mismo con Superquimera 8c+ en Cobas (Galicia).
¿Cuál es su paso clave?
A mí me costaba un paso de un romo al empezar lo duro y coger una regleta neta desde una pinza muy pequeña casi al final, donde me caí un par de veces hasta que cambie el método.
¿Cuánto trabajo/intentos te ha costado?
Hice Nowa 8c a finales de 2002; después, la primera ascensión de Powerade en otoño de 2004, y me pareció que merecía el 8c+. A partir de ahí no volví hasta la primavera de 2009. Le di un intento a Súper Napal Death 8b+, que comparte el tramo duro del final para conocerlo porque la acababan de proponer como 9a. Pero no volví hasta hace un par de meses, cuando fuimos a la boda de un compañero en Zaragoza y el domingo, sin tener muy claro qué hacer, nos acercamos a escalar a Vadiello. Ese día, a pesar de la resaca, le di un par de intentos y decidí volver cuando me encontrara más en forma para intentar encadenar. En julio, mi novia Sara Aicart quería competir en Rodellar y a mí me quedaba una semana de vacaciones, así que acabamos por allí. La debí probar 4 o 5 días, la mayoría por inercia, ya que entre el calor que hizo esa semana y más que esto mi inesperado estado de forma no tenía muchas opciones, pero aun así la dejé con una caída.
El fin de semana pasado fue diferente, llevaba dos semanas entrenando muy fuerte, pero aun así en dos findes probé un proyecto de 9, encadené 8c, 8b+ y 8b en pocos pegues, y a vista hice dos 8a+ y tres 8a. Así que el lunes le dije a Sara -que también tiene un proyecto en La Caverna- si bajábamos un poco el pistón esa semana y nos acercábamos el finde a probar. El primer día le di 3 intentos, el primero sin forzar ya llegué hasta el tramo duro de arriba, el segundo estuve a punto de salir pero me caí dos veces más en un paso donde al final cambié de método el segundo día después de caerme otra vez allí. En el penúltimo intento, me caí al ir a coger el canto de la reunión y me temía lo peor, pero Sara me animó a que le diera uno más antes de marcharnos. No las tenía todas conmigo, pero ese fue el definitivo.
¿Fue un objetivo muy planificado?
No, lo único que tenía claro era el momento para probar algo duro y para eso la cosa se torció un poco. Suelo tener en el punto de mira unas 10 vías entre 8c+ y 9a+. Le doy preferencia a las que ya conozca o haya probado y/o estén en una escuela donde vaya a ir habitualmente; luego según la época o las ganas que tengan de ir los compañeros a esa escuela me decido. En Santa Linya y Siurana tengo muchas por tachar pero ahora no es buena época y también por cambiar de aires porque en primavera ya escalamos mucho en Santa Linya. Sara iba a la compe de Rodellar así que pensamos en Guara, en Rodellar no tenia nada picoteado… así quedó más o menos claro ir a Vadiello.En cuanto al momento, esperaba estar en forma hacia finales de junio y primeros de julio, que fui al Campeonato de España y después cogí un par de semanas de vacaciones, pero no fue del todo bien y hubo que esperar unas semanas.
¿Cómo te sientes tras haberla encadenado y sumar así tu tercera vía de noveno grado?
Bien, normal, no soy muy efusivo cuando encadeno algo duro. Soy muy tranqui escalando, como mucho pego algún grito cuando me caigo muchas veces en un mismo paso y me rallo, pero es raro que lo haga.Me alegró mucho mas hacer Definición de resistencia demócrata (9a+), me parece una vía más dura y exigente y era mi primer 9. De Supernowa me quedó buen sabor de boca porque el día del encadene, en el pegue anterior me había caído para ir al canto de chapar reunión y ya creía que no la hacía ese finde. Le di un último sin mucha confianza, pero según iba subiendo y veía que cerraba mejor las presas que en el pegue anterior me lo fui creyendo. Aun así, cuando llegué a coger la pequeña regleta de arriba en el último paso no las tenía todas conmigo; cuando vi el canto bueno debajo de mi mano me llevé una alegría.
En tu currículum de escaladas más difíciles hay muchas escuelas diferentes, ¿cuáles son tus escuelas favoritas?
A mí me hace falta poco para que un sitio me guste, pero cuando me preguntan por esto me viene a la cabeza Teverga, Terradets, Siurana y Pirineo de Huesca. Son sitios donde la mezcla de escalada con el ambiente del lugar, recuerdos, amigos, gastronomía y demás me transmite una sensación de bienestar inigualable que no me sucede en otros lugares. Quizás Teverga, porque he crecido escalando allí y a día de hoy no me canso de volver… quiero empezar a equipar nuevas líneas para poner mi granito de arena en esta fantástica escuela. Terradets y Siurana, por los buenos momentos durante los años que estuve en Lérida, y Pirineo de Huesca por su ambiente y la belleza del entorno. ¿Dónde se te puede ver escalar habitualmente? ¡Donde haya vías duras!… Para mí y para mi chica. Siempre me he movido mucho y además ahora llevo tres años bastante itinerante por trabajo entre Coruña, Ponferrada, Daroca, otra vez Ponferrada. Mi novia vive cerca de Barcelona, así que el radio de acción es amplio.
¿Tienes algún próximo objetivo marcado?
Así a corto plazo escalar a vista, intentar consolidar el 8b+ o escapar del calor, que el mes de julio ha sido duro. Para más adelante, cuando esté más fresco, a ver cómo andamos y dónde, porque la localización laboral no la tengo muy definida a día de hoy. Si pudiera ser, estaría bien probar algún 9 en Santa Linya o quizás La rambla o alguna de sus variantes, y si no con escalar y equipar más vías cerca de casa ya estaría bien.
¿Cómo te preparas? ¿Mucho entrenamiento en plafón?
Por mi cuenta y riesgo, normalmente me planeo para varias semanas, según vacaciones o épocas buenas para escalar en algún sitio, pero no siempre. Hace poco, estuve un año entero sin planear nada, escalando a reventar cuando podía y en el panel haciendo campus, que me gusta mucho. Cada entreno que me planeo tengo algo nuevo en la cabeza, así que intento innovar y probar cosas nuevas, pero casi siempre con la premisa básica de ir de entrenos más lentos y voluminosos a entrenos más explosivos y específicos. Ahora, lo he adaptado al ritmo laboral y hago más frecuencia semanal pero menos volumen por sesión. Suelo entrenar de 3 a 5 días por semana en el panel de 2 a 4 horas, y el fin de semana intento escalar en roca.
¿Qué tiempo dedicas a entrenar en roca?
Ahora no tanto como quisiera. Para mí, es el mejor entrenamiento posible si quieres encadenar vías difíciles. Quizás al principio, para hacer base o volumen, el plafón sea más útil o más cómodo, pero cuando llega la hora de la verdad el mejor estímulo es el propio gesto competitivo, o sea ir a probar la vía elegida u otra de una dificultad y características próximas a ella. Antes tenía más tiempo para ir a roca: vivía en Lérida, estudiaba y llevaba otro ritmo. Las cosas cambiaron y me costó bastante adaptarme, pero parece que después de un tiempo lo voy compaginando todo mejor que el principio. Ahora es raro que pueda escalar en roca más de dos días por semanas, salvo que tenga fiesta o vacaciones. Ahora, cuando ando fino, tengo que ser más efectivo, encadeno vías del mismo nivel que hace un tiempo escalando menos.