La roca está siendo propicia con las escaladoras francesas, especialmente en las paredes de Catalunya. Caroline Ciavaldini y Alizée Dufraisse son dos de las jóvenes galas que andan por las escuelas catalanas escalando proyectos de gran dureza, y se han llevado el gato al agua casi de forma simultánea, con Mind control 8c+ en Oliana y con El rastro 8c+ en Siurana, respectivamente.
Caroline Ciavaldini, que hace pocos días lograba el encadenamiento de Fish eye 8c, su octava vía en este grado, subía un escalón más en el camino de la máxima dificultad y se adjudicaba ayer el primer 8c+ de su libreta también en Oliana, con Mind control. Según cuenta el fotógrafo Francisco Taranto JR en su blog, la escaladora francesa completó el encadenamiento en su segundo intento del día (y tercero en total), “con otra demostración inspiradora de fuerza de voluntad y determinación”. Se da la circunstancia de que Ciavaldini ha podido celebrar hoy su 27 cumpleaños libre de la presión de ese proyecto y, conta seguridad, pensando en una nueva vía a la que hincarle el diente antes de partir de Catalunya el 21 de marzo.
Alizée Dufraisse, 8c+ en Siurana
Mientras tanto, Alizée Dufraisse también se subía al 8c+, en su caso en la escuela tarraconense de Siurana, donde ha encadenado El rastro. De hecho, la francesa ha tomado las paredes del Priorat como su segunda casa. Allí encadenó su primer 8c+ el pasado mes de diciembre con Pati noso; y posteriormente se alzó hasta el noveno grado grabando su nombre en La reina mora (9a para ella, 8c+/9a para otros repetidores).
Dufraisse explica en su blog que “después de La reina mora, realizada el 23 de enero, el mes de febrero ha sido duro aquí, y durante 15 días hemos afrontado temperaturas que han descendido hasta los -15ºC, pero la primavera ha llegado finalmente a Catalunya y con ella el regreso a los proyectos”. El rastro, abierta por Dani Andrada, es “la más fácil de las cuatro vías del sector de La Rambla”. Según su propia descripción, se trata de “una línea idéntica en tres cuartas partes a la línea de La Rambla, con un final hacia la izquierda en continuidad que para mí debe estar en el 8b”.
Después de que Sasha DiGiulian declarara esta misma semana que uno de sus objetivos es adjudicarse la primera femenina de La Rambla 9a+, se ha dado luz verde a la competencia entre las escaladoras, ya que Alizée Dufraisse también anuncia que “el asedio de La Rambla continúa… estaré en Siurana hasta mediados de abril, con alguna que otra estancia en Margalef sobre Era vella 9a. He decidido emplear grandes medios para vencer a La Rambla, atacándola por la derecha con La reina mora y por la izquierda con El rastro…”. De momento, sin embargo, su otro objetivo principal va a ser Broadway 8c+/9a, la otra vía que le falta en el mismo muro.
Florence Pinet y Seb Bouin destacan en su país
Y mientras Caroline Ciavaldini y Alizée Dufraisse le dan duro a la roca catalana, otra de las grandes escaladoras francesas del momento, Florence Pinet, ha regresado a su país después de escalar Kale borroka 8b+ –también en Siurana. Allí se ha hecho con el encadenamiento de Tête de gondole, otro 8b+ para su libreta en Millau, según informa Kairn.
Finalmente, una mención también para los chicos franceses. En este caso, ha destacado Sébastien Bouin, que ha realizado la primera ascensión de Casi mono en el Verdon, vía que propone de 9a. Se trata de la línea directa de la vía Casimodo, según se puede leer en Kairn.com, y se divide en una primera parte de 8a/8b que conduce a un reposo, antes de afrontar la sección clave compuesta por media docena de movimientos explosivos y duros –dinámicos sobre monodedos-, antes de terminar enlazando con Casimodo 8b+/c.