Los tres montañeros de la expedición Naturgas Broad Peak 2010 han salido del campo base (4.900 m.) a las 4.30 de la mañana y han terminado la jornada a la 10.30 (horario pakistaní), después de encontrar el terreno en mejores condiciones de las que esperaban, sin apenas tramos de hielo. La vía que han escogido, jamás escalada por nadie, sube directa hasta el collado que se abre entre la cima norte (7.550 m.) y la cima central (8.013 m.), y desde allí pretenden encadenar esas dos cumbres más la principal (8.047 m.), una travesía que sólo se ha realizado dos veces en la historia.
Los montañeros quieren aprovechar una ventana de tiempo seco que, según las previsiones recibidas ayer miércoles, se extenderá hasta el 12 de julio, aunque es posible que el fin de semana se encuentren con viento demasiado fuerte como para completar la travesía. Los próximos partes permitirán hacerse una idea más detallada de sus posibilidades.
Creen que necesitarán cuatro o cinco jornadas para cruzar las tres cumbres. Mañana, viernes 9 de julio, intentarán acercarse lo máximo posible al collado, a unos 7.300 metros. Si encuentran zonas con hielo o largos en los que necesiten asegurarse, la marcha se ralentizará y deberán excavar alguna plataforma para pernoctar. Lo ideal sería alcanzar el collado, donde les resultaría más fácil encontrar un espacio suficiente para plantar la tienda.
El sábado 10 de julio pretenden hacer cumbre en el pico Norte del Broad Peak (7.550 metros, el más bajo de los tres) y regresar al collado, donde podrían pasar la tercera noche. Si el plan sigue las previsiones iniciales, el domingo 11 los montañeros harán cima en el escarpado Pico Central (8.013 metros) y bajarán al collado que lo separa del pico Principal. Ese collado está a 7.800 metros, altura en la que los tres alpinistas tendrán que pernoctar.
Y el lunes 12, ¡tercera cima! en el último pico de la travesía, el Pico Principal del Broad (8.047 m.), desde donde bajarán al campamento base después de recoger las mochilas del collado.
La mochila
Fieles al estilo alpino, en las mochilas, que no pasan de 12 kilos, cargan con todo lo que van a usar: una tienda de campaña para dos personas en la que dormirán los tres, un saco ligero por cabeza (pesa menos de un kilo), una pequeña esterilla, la ropa especial para altura (un buzo integral de plumas, manoplas, gafas de ventisca…), una pala sin mango, las frontales, el walkie, una cámara de vídeo y tres de fotos, el botiquín con analgésicos para los dolores de cabeza en altura y corticoides para posibles edemas…
Y el material de escalada: crampones, casco y dos piolets cada uno, más dos cuerdas de kevlar de 50 m y 5 mm, seis tornillos de hielo, cuatro clavos de titanio para la roca, seis fisureros y una estaca de nieve.
La comida
El menú será frugal hasta el límite y sólo contempla desayunos y cenas, porque durante la jornada será a base de alguna barrita energética. Los desayunos consisten en té y cereales. Para la primera cena prevén tomar un plato de cuscús con atún y una crema de verduras. Para la segunda, un puré de patatas y una sopa. Para la tercera, unos sobres de arroz con leche liofilizado y galletas. Y para la cuarta y última, en vísperas de la subida a la cumbre, apenas una sopa.