Como ya adelantábamos en la información que ofrecimos sobre los Huber en su vuelo por la Nose, los dos hermanos alemanes pretendían volver para repetir la línea aún más rápido y establecer un record fuera de toda duda. Pues lo han hecho. Inasequibles al desaliento, Alex y Thomas se volvían a calzar los gatos para ascender la mítica línea de El Capitán, en Yosemite, cuatro días después.
Los 31 largos de la ruta cayeron en 2 horas 45 minutos y 45 segundos, cerca de tres minutos más rápido que su último ascenso, una marca que, ahora seguro, bate el récord de velocidad de la vía, impuesto por ellos y por un margen de 20 segundos el 4 de octubre. Llevaban tres años intentándolo y cuando lo lograron no quedaron muy satisfechos, así que el 8 de octubre volvieron a superar a Hans Florine y Yuji Hirayama y a su tiempo de 2002.
No todo fue agua de rosas, ya que Alex Huber, mientras lideraba uno de los largos, resbaló, quedando colgado de uno de los brazos y poniendo en peligro tanto su integridad como la ascensión. Pero Alex Huber, capaz de las escaladas más extremas en solo integral, tiene «cuerda» para superar la adversidad. Y de nuevo lo ha hecho.
Esto de los récords de velocidad en El Capitán no debe entenderse como un afán de superioridad y competitividad, más al contrario, pues son entre los propios escaladores los que se alientan por superar su propias barreras y dejar constancia de la evolución positiva que vive la escalada de nuestro tiempo. Su marca formaba parte del futuro, veremos si a no mucho tardar forma parte del pasado.
Vídeo de su intento en 2006
Fuente: climbing.com