El escalador estadounidense Jonathan Siegrist encabeza la crónica del rotpunkt internacional, por delante de un grupo de escaladoras formado por la austriaca Christine Schranz, la francesa Florence Pinet, la noruega Hannah Midtboe y la australiana Andrea Hah cuyos encadenamientos han destacado también esta semana.
En Arrow Canyon, una zona situada en el desierto de Nevada, Siegrist ha conseguido la primera ascensión de Le reve, vía que propone como 9a. Según una entrevista de Rock & Ice al escalador, Siegrist señala que “el primer crux de la vía llega en seguida; en unos movimientos de tensión a través de una serie de presas horribles sobre terreno desplomado. Después, tienes un buen reposo en una presa con malos pies –tú última oportunidad para reposar en unos 8 metros. El siguiente paso clave viene poco después: incluye tres monodedos, un movimiento explosivo en un desplome de 40 grados y un largo movimiento aleatorio a un bidedo”.
Lo siguiente, según sigue narrando Siegrist, es que “inmediatamente te metes en un problema de búlder muy desplomado a base de invertidos, otro monodedo y este romo de locura, para terminar con un aleatorio a un canto, y entonces sí, un buen reposo antes de afrontar la salida”, que es más asequible.
Jonathan Siegrist comenta que necesitó unos 30 intentos en un total de 15 días de escalada para encadenar el proyecto. Una vez hecho, no tiene muy claro qué grado proponer para Le reve: “dediqué mucho tiempo y esfuerzos, y me pareció claramente más dura que cualquier otra vía que jamás haya hecho (en su libreta figuran vías duras como Pure imagination o Golden direct, ambas 9a)… pero no tengo nada de experiencia escalando en el reino del 5.15 (9a+), así que soy reticente a declarar ese grado astronómico”.
Éxito femenino en Catalunya
Las escuelas catalanas han atraído, este invierno de buena condición más que nunca, a escaladoras de toda Europa, con la intención de anotarse interesantes encadenamientos en estas paredes. Las más destacadas han sido la austriaca Christine Schranz y la noruega Hannah Midtboe.
Schranz se ha hecho en Oliana con su primera vía de 8c al encadenar Fish eye. Esta línea de más de 40 metros de recorrido es una de las más concurridas de la escuela ilerdense, especialmente por escaladoras de alto nivel. De hecho, la repetición de Schranz emula a las realizadas anteriormente por Daila Ojeda, Eva López o Nina Caprez.
Mientras tanto, Hannah Midtboe, buena conocedora de las escuelas catalanas y aragonesas, ha regresado una vez más a Santa Linya (donde el pasado mes de diciembre se hizo con Fabelita, su primer 8c) para tachar ahora el segundo, con Rollito Sharma extension 8c. En su perfil de 8a.nu, la escaladora noruega comenta que la vía ofrece “un estilo muy guapo de escalada, especialmente después de la rotura de una presa”. Un estilo que describe como “dinámico, delicado y potente”. Precisamente no hace muchos días que la misma línea recibía la primera femenina, a manos de la belga Muriel Sarkany.
Un grado por debajo, en el escalón del 8b+, Florence Pinet ha conseguido llegar a la cadena de Kale borroka, en este caso en Siurana. Según desvela Kairn.com, la escaladora francesa realizó su encadenamiento en el primer intento del día en un fin de semana exprés en la escuela tarraconense, después de haber trabajado la vía tres años atrás.
Andrea Hah se sube al 8b+
Finalmente, merece un comentario también la australiana Andrea Hah, que ha conseguido escalar el primer 8b+ de su carrera con Mr. Line, en las Blue Mountains de su país.
