Está siendo un buen año en el Broad Peak (8.047 m). Con motivo de su cincuentenario se han reunido allí a un gran numero de alpinistas de élite, expediciones con un objetivo claro para esta temporada: coronar el Pico Ancho. La pasada semana hollaron su cima expedicionarios como Edurne Pasabán, Iván Vallejo, Carlos Pauner, Silvio Mondinelli o el ecuatoriano Santiago Quintero, que se llevaba su primer ochomil. Las condiciones climatológicas cambiantes y el tiempo de aclimatación impidieron que Carlos Soria participara en la macro ascensión que puso a decenas de alpinistas en la cumbre.
El 17 de junio se iniciaba un nuevo intento de Carlos, acompañado por Luis Carcavilla (Sito) y Rafael Sánchez de la coba (Rafa), al Broad. Una cumbre que cual espinita estaba clavada en el espíritu de Soria, que ya había intentado la cima en cinco ocasiones, la primera de ella hace más de 28 años. Carlos es un decano del Himalaya, cuenta con 68 años y continúa en forma.
Fue el 18 de julio, cuando aprovechando un corto periodo de buen tiempo, anunciado por su amigo y meteorólogo Juan Guerra, Carlos, Sito y Rafa partían camino de la cumbre. Salvaban el primer día los 1.500 metros de desnivel hasta llegar al Campo 2. Un campo de altura que habían situado por encima del habitual debido a la afluencia de alpinistas. «Fue una jornada muy dura por las malas condiciones del recorrido después de las avalanchas caídas en los días anteriores, lo que dejó la ascensión prácticamente sobre hielo», aseguraban en su crónica.
Cayó el siguiente día y Carlos y Sito ascendían hasta el Campo 3 (7.100 m). Rafa no se encontraba bien y esperó otra jornada en el C2. Finalmente, Rafa, se retiró al Campo Base al no hallarse en plenas condiciones.
Una dura ascensión
El día 20, a la una de la noche de la hora local, Carlos Soria y Sito atacaban la cumbre, acompañados por otro grupo de alpinistas en el que se encontraban amigos como Fernando y Hernán. El reloj marcaba las 10 de la mañana cuando pisaban el collado, a 7.800 metros. Restaban tres horas para la cumbre y viento rugía peligroso. Carlos ya se ha enfrentado a numerosas situaciones de esas en las que paras el tiempo, te suspendes y te preguntas ¿arriba o abajo?. Esta vez fue hacia arriba: «Hacía mucho viento pero había que intentarlo, así que seguimos hacia la cumbre».
Llegaban a la antecima, a 8.028 metros, y Sito decidía no continuar. Notando adormecidos por el frío varios dedos de la mano daba media vuelta, no quería, ni debía, exponerse a llegar de noche al Campo 3. Carlos continuó, llegando a la cumbre principal del Broad Peak a las 13 horas. Habían pasado 20 horas de actividad cuando iniciaban el descenso hasta el C3. Amaneció al día siguiente con fuerte viento, pero aún así bajaron los 2.300 metros de desnivel desde C3 al Campo Base, para celebrar la ascensión y compartir la montaña con Rafa y el resto de alpinistas que aguardaban su llegada.
Pero Carlos no ha sido el único que ha logrado la cumbre. La paciencia ha dado sus frutos y la espera a una tregua del mal tiempo por parte del equipo de Al Filo de lo Imposible ha resultado un éxito. Una semana ha pasado desde que Edurne, Iván Vallejo, Ferrán Latorre y Asier Izaguirre, también miembros de Al Filo, hollaban la cima del Broad, manteniéndose a la espera Esther Sabadell, Juanjo Garra y Valentí Giró. Los tres también se han hecho con la cumbre del Broad, con lo que se unen a la fiesta de Carlos Soria y el resto del equipo del programa dirigido por Sebastián Álvaro. Pronto contaremos con más información sobre dicha ascensión.