«Mostramos los botes de sica que había desperdigados y algunos hierros peligrosos que encontramos en la pared», así, nos contaba Xavier «Harry» García, guarda del refugio d»Agulles Vicenç Barbé en Montserrat, como iniciaron los actos de la manifestación celebrada el 9 de febrero, a la que asistieron cerca de 180 personas, respondiendo a una llamada, que según oraba la convocatoria no partía de ninguna entidad ni organización:»Si te sientes implicado te esperamos».

El motivo, movilizarse y establecer líneas de acción para el futuro contra la involución de la escalada, el retroequipamiento, la saturación y la masificación de las vías. Y es que en los últimos años la gran afluencia de escaladores a los sectores de Montserrat y el uso indiscriminado de sicadur empezaban a dejar en un estado desazonador la situación de la montaña: «Al final esto parece un rocódromo».
«La intención, que creo hemos logrado que salga adelante, era concienciar a los escaladores de que estamos ante un parque natural que debemos proteger. Minimizar nuestro impacto no es sólo una filosofía de escalada, si no de la persona», continuaba Harry.
Ser montañeros

Personajes como Armand Ballart o Toni Cugat también mediaron por la protección de las agujas montserratinas, proponiendo empezar con la reequipación de vías y con el posible estudio de una regulación para sus sectores. «Fue muy positivo a nivel docente. Muchos de los implicados en la apertura de vías con tallados y sicas se mostraron arrepentidos y dispuestos a arreglar los desperfectos ocasionados en la roca. Así es como se logran las cosas, predicando con el ejemplo».
A pesar de que, como menciona Xavier, hay vías abiertas de sobra («Nadie se va a quedar sin escalar») aún quedan algunos escaladores reticentes a dichas acciones, aunque a la vista del éxito de la manifestación y de los trabajos que van a empezar a llevarse a cabo, estos escaladores están cada vez más aislados.
La convocatoria se completó con la lectura de manifiestos, entre los cuales se incluyó el célebre escrito de Josep M. Alsina «La Edad de Hierro»; una reflexión contra el abuso de las expansiones y la regresión de la escalada como inadaptación al medio por parte del escalador. El ambiente fue cordial durante toda la jornada, colocándose también las tradicionales pancartas en la pared y siendo amenizado el evento con un espectáculo de acrobacias aéreas protagonizado por Loren Galen.
«Veremos como continúa todo en el futuro», concluía Xavier García, «Hemos llegado a un punto del desarrollo de la escalada en el que debe primar el componente ecológico. Entonces podremos decir que somos montañeros».