Una noticia viral de ayer martes 8 de diciembre de 2020 en todo el mundo fue el anuncio común por parte de los gobiernos de China y Nepal sobre la altitud del Everest. La cumbre más alta del planeta se sitúa en los 8.848,86 metros. Medios de comunicación y redes sociales estallaron ante la supuesta bomba informativa, que básicamente se resume en que el Everest tendrá una altitud de 8.848 metros, como viene siendo comúnmente aceptado desde 1955.
El dato llega después de sendas campañas científicas con importante seguimiento mediático organizadas respectivamente por Nepal en primavera de 2019 y por China en primavera de 2020. Su principal valor, más allá de lo positivo en sí mismo que tiene políticamente un acto conjunto entre Nepal y China, es la confirmación definitiva de que el terremoto de 2015 no afectó la altitud del Everest.
Sin embargo, desde la perspectiva científica, la noticia es poco relevante, igual que desde el punto de vista del alpinismo. Lo resume el prestigioso geógrafo, escritor y alpinista Eduardo Martínez de Pisón en las siguientes reflexiones tras conocer la noticia:
“Es una noticia un poco ridícula. Para salir con unos pocos centímetros… es verdaderamente absurdo que dos países como China y Nepal hagan una proclamación para ponerse de acuerdo. Y en esas cosas, además, no son los países los que se ponen de acuerdo, sino los topógrafos. Los topógrafos hacen unas mediciones técnicas y se acabó. Y para salir otra vez prácticamente con la misma altitud, es evidente que no hacía falta.”
“Luego, hay una diferencia de concepto entre altitud y altura. Lo que han dado es la altitud, es decir, la cota sobre el nivel del mar. Mientras que la altura es el desnivel o lo que también llaman prominencia, que es la relación que existe entre la base y la cumbre. Además, en geografía, cuando se da una cota, se da la cota de la totalidad del macizo, por lo menos. Yo diría que hay que dar una respuesta de carácter comarcal; se hace un mapa y se dan las cotas referenciadas unas con otras: Rongbuk, Khumbu, Dingboche, el Ama Dablam, el Lhotse, el Nuptse… ¿Han variado o no? Todo esto es pura propaganda.”
“En un montañón de ese tamaño, ochenta centímetros no son nada. Es ridículo y además no viene a cuento. Si hubiera sido que hubiera cambiado unos cuantos metros abajo o arriba, pues ya sería para tomárselo en serio, pero cambiar unos centímetros la altitud de un montañón de esa enormidad… yo lo veo una ridiculez.”
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La noticia seria que el Everest ha perdido altura. El Himalaya es una cordillera joven que continua ganando altura. En otros 50 anyos el Everest alcanzara los 8850 metros. Que los topografos tomen medidas no es una noticia digna de mencion.
Siendo puristas habrá un cambio en la altitud exacta, no seguirá siendo 8.848 si no 8.849.
Pues creo que sirve para cambiar de 8848 metros, a los más aproximados ( 0.86 frente a 0.14 centímetros) 8849 metros
No entiendo el comentario de Eduardo Martinez de Pisón.¿Que tiene de malo conocer la altura de las montañas con exactitud si es algo que se lleva intentando hacer desde que existen mapas fiables?. Por eso me sorprende en una persona de su categoría que hable de propaganda cuando el Everest es la montaña mas conocida del mundo.
Propaganda sobre el Everest, quiza?
En mi modesta opinión, el tema de las expediciones está muy mal, y yo creo que necesitan darle un empujón, pues mucha gente vive de dichas expediciones.
Yo tambien pienso que es una noticia ridícula, 86 cm en esas dimensiones.
E incluso ha salido en los telediarios.
Un saludo.
¿Propaganda sobre qué?