Christian Core regresa al 8c. El de Savona trabajaba durante cuatro meses en Varazze, donde encontraba, en el sector Antro dei druidi, una línea muy evidente sobre un canto situado a la derecha de la célebre cueva de la zona, en la que, entre otras, se estira Le chiavi del regno, travesía de 7b famosa en la región. La línea la descubría el pasado verano, cuando estudiaba las vías más estéticas y lógicas de la zona, hasta que dieron con Gioia, un problema con señales de haber sido probado a pesar de su más que evidente dificultad. Christian no tardó en darle el primer tiento a sus exigentes agarres, pero llegó la lluvía y decidió posponer los intentos al proyecto.
El italiano regresó en invierno, sufriendo un largo periodo de lluvias y nevadas y, a pesar de ello, no perdiendo la motivación, aprovechando los pocos días de tregua para limpiar y probar la vía. «En aquellas condiciones era muy difícil valorar la dificultad del bloque». Y más lo fue después, cuando rompió una presa en la sección crucial debido a la humedad de la roca. «Vale, mejor iba a ser esperar a que cambiase el tiempo, así no estropeaba más una línea perfecta». Y esperó, no mucho, hasta que las nubes se difuminaron, dejando unas condiciones envidiables: «¡Sol y aire fresco durante muchos días!»
Core, en seguida, volvió a meter las manos en la masa y no perdió ni un día de intentos «hasta que por fin llegó el día tan esperado en que resolví Gioia, las últimas semanas sólo las había dedicado a este bloque, la alegría fue inmensa. Creo que es lo más duro que he escalado nunca». Por eso, Christian sugiere 8c y anima a que los posibles repetidores prueben este problema de catorce movimientos, pies precarios y agarres mínimos. «Una hermosa línea, que en realidad debemos agradecer a Marco Bagnasco, por su interminable deseo de descubrir nuevas rocas y su generosidad en la preparación de otras líneas, dándonos campos de juego para que cada uno encuentre su bloque ideal»
Avalado por los precedentes
Cuando Christian dice que es lo más duro que ha escalado hay que tener en cuenta, sobre todo, tres bloques anteriores a los que el italiano les añadía una muesca. Obviamente, Dreamtime (8c), el superclásico de Fred Nicole, resuelto en 2000 por éste y en 2003 por Core. En aquel momento definía la línea como «el bloque más bello que he hecho». El primer 8c de bloque del mundo, que mantiene todavía hoy su grado, es una buena muestra de lo que Christian puede hacer. Pero no se queda ahí. De hecho también viajamos con el hasta el Piamonte italiano, «un excelente paraje con vacas, ríos y un agradable ambiente donde pasar algunos días en verano». Allí, en tan idóneo territorio, Christian resolvía un viejo proyecto, Kimera, «una travesía perfecta sobre roca naranja y marrón». 30 grados de desplome, asolado de planos y regletas, quince duros agarres y salida sentado. Christian proponía 8c.
A finales de 2006, volvería a saborear el mítico grado. Ubicado en Averstal, uno de los sectores del atractivo Magic Wood suizo, New base line (8c), tras la apertura y primera ascensión protagonizada por el maestro Bernd Zangerl, y la segunda de Nicole (ambas en 2002), conocería la quinta repetición de la mano de Christian Core. Once movimientos de planos y microregleta que el italiano se sumaba a la libreta. En aquel momento no se pronunció sobre el grado del problema, pero tras las ascensiones de Zangerl y Nicole y las posteriores de Franz Widmer y Dave Graham el 8c se confirmaba.
¿Gioia 8c?. Tendremos que esperar a ver que dicen los repetidores, aunque la opinión de Core es, para muchos, más que suficiente.
Fuente: infoboulder.com