¡Objetivo cumplido!. Jonathan Trango y Antonio Urbaneja nos escriben desde Puerto Natales (Chile) donde descansan, y lo celebran «contentísimos», después de completar la que seguro será una de las actividades nacionales del año, escalar las tres torres del grupo del Paine. La expedición a Patagonia de Trango y Urba estaba reconocida por la FAM como «Actividad oficial» y patrocinada por la Conserjería de Comercio, Turismo y Deporte de la Junta de Andalucia, quienes se lanzaban a apoyar un objetivo complicado y comprometido, para el que contaban con 40 días, aunque finalmente les ha sobrado tiempo.
Aunque ya la mera idea de encadenar las tres ascensiones era una empresa ardua, los dos escaladores querían ir más allá, lográndolo en estilo alpino, ligero y rápido. Y han cumplido, con creces, completando las tres rutas escogidas en libre y a vista. En la Torre Norte se hacían con la Vía Monzino, para la que emplearon 11 horas (ida y vuelta al CB incluidas) superando sus 400 metros de hasta 6a+. Llegaban a la cima el 26 de enero.
La segunda de sus ascensiones la protagonizaban en la Torre Central, por la Bonnington-Whillans, abierta en 1963. Resolvían su 650 metros el 28 de enero, haciéndose con tramos de hasta 7a+ en 23 horas (con ida y vuelta al Campo Base). Esta fue la única de las rutas que no pudieron escalar a vista por completo, sufriendo dos caídas en el largo clave. Nunca usaron artificial.
Pero aún les quedaba lo más duro. La Torre Sur, donde se alzaba la Vía Espigolo Norte, de 900 metros y dificultades de hasta 6c. Respetados por el clima, si es que tal cosa puede ocurrir en Patagonia, la aguja les permitía llegar a la cumbre el 7 de febrero, tras 20 horas de actividad desde el CB, convirtiéndose en una de las poquísimas cordadas que han escalado las tres torres en una misma temporada y firmando la segunda nacional (la primera corría a cargo de Pedro Cifuentes pocos días antes).
Entrevista a Jonathan Trango antes de su expedición.
Fuente: Jonathan Trango