Hace poco decíamos que Edu Marín ya iba recuperando la forma física, a base de buenos rotpunkts y de entrenamiento duro en el plafón, pero nos equivocamos; Edu ya estaba en forma, y lo ha demostrado encadenando una de las rutas más duras de la península, La novena enmienda, un 9a+ de Santa Linya propuesto por Dani Andrada (creación suya) como 9a+/b y confirmado sin barra por las repeticiones de Chris Sharma y Patxi Usobiaga que, cuando menos, no se pronunciaron al respecto.
La novena enmienda son 50 metrazos, equipados en 2005, que combinan los 22 primeros metros de La novena puerta (8c+ de resistencia) y que se unen a los 30 metros de continuidad de La enmienda, tras un incómodo reposo de rodilla. «Es una línea muy física, desplomada y de resistencia. Cuando superas el tramo final, con lance a un monodedo para después coger un invertido, ya casi lo tienes hecho», comentaba Edu.
Respecto al grado, Edu Marín se moja: «Me ha parecido más fácil que La Rambla (9a+), me ha costado menos trabajo pero también es otro estilo de vía, se me da mucho mejor. Es una línea muy buena y la mitad de la cueva es de 8c así que sí puede ser 9a+».
Año nuevo, recuperación total
Y es que se viene notando que los días son productivos en Santa Linya, quizá sea el ambiente fanático o un extraño sol de invierno, pero Edu, dejando atrás la sanción que le ha alejado de la competición, está sabiendo aprovecharlo. «No ha sido fácil volver a entrenar hasta que te sangren las manos, pero es lo que mejor se me da», y no le falta razón. En el último mes se ha llevado, en Santa Linya, el primer largo de La nueva ola (8c+), cuyos dos largos restantes continúan siendo un proyecto y ambos podrían alcanzar la novena dimensión, Ingravid extension (8c+) al tercer pegue, Rollito Sharma extension (8c+) a la segunda, Travesía de la enmienda (8c+), La novena puerta (8c+) y La Ruta del Sol (8b) a vista, entre otras.
En diciembre, las cosas también empezaban a salirle como nos tiene acostumbrados, resolviendo en Rodellar, Petit cusinier (8b+) a vista y Alter ego, 8b también onsight. Y en Montsant se apuntaba Falconeti, 8b+, y otro 8b, ambos a vista.
Así pues, Marín vuelve al lugar que le corresponde, tras un par de meses algo inactivo, situándose de nuevo a la vanguardia de la ola encadenadora que asola las paredes catalanas en este principio de 2008. Además, Edu advierte a la redacción de Desnivel: «Pretendo daros mucho trabajo».