Fue hace unos días cuando dijimos que Julius Westphal había encadenado su primer 9a. Lo conseguía en Kronthal, una escuela que se encuentra a unos veinte minutos de Estrasburgo. La vía todavía no tenía nombre. Fue abierta por Yann Corby en 2006 y escaladores como Pierre Bolinger o Löic Fossard le había dado algunos tientos, aunque sin éxito. Pierre tuvo que abandonar los intentos por una lesión. Luego vino Julius, a principios de Julio, y encadenó el techo de más de 15 metros horizontales, con presas precarias, que ha bautizado como Aloha.
La línea de arenisca de Kronthal no era el primer rotpunkt duro que se llevaba al bolsillo éste alemán de 20 años. La historia interminable (o Unendliche Gesichte) se convirtió en el bloque más duro realizado hasta la fecha cuando en 2003 Chris Sharma lograba unir las dos secciones del problemón de Magic Wood. Sharma puso fin a una historia en la que escaladores como Bernd Zangerl o Dave Graham habían invertido mucho tiempo. El americano dejaba el debate sobre el grado a otros, y estos la proponían como 8c o quizá 8c/c+. La historia tuvo un epílogo. No mucho después, Julius Westphal, que por aquel entonces contaba con 16 años, se llevaba la repetición. Y ponía en duda el grado. Julius propuso 8b+.
Tampoco se le ha dado mal con la cuerda. El alemán tiene en su libreta la primera de Mekka direkt, un 8c+ de Pfalz (Alemania) al que se le suma Aloha, primer noveno grado de Kronthal.
De Sharma y otros rotpunkts
Hablar de Chris Sharma en el segundo párrafo ha sido intencionado. Sharma tiene buena nueva, no tiene que ver con el 9b que anda probando en el yanqui, pero es buena. El americano estaba tanteando la roca de Cëuse (Francia) y le dio por probar una vía, a cincuenta metros de Biographie (9a+) (aquella que encadenará en 2001 y le colocará a la vanguardia de la dificultad), y como suele ocurrir cuando la bestia se centra en sus practicas salvajes, se ha embolsado los tres lances que esconde la vía. Los tres grados de superación se llama (aunque se espera una confirmación de Chris) y se habla de 9a (también se espera confirmación, aunque ésta será más difícil).
Y es que el americano no siente pasión por los números, sólo por la experiencia. Sentimiento que comparte Pablo Barbero, que también estaba de correrías por las paredes francesas. El madrileño tampoco perdió el tiempo, trabajó mucho la vista (se ha hecho con dos 8a´s y dos 8a+´s) y bregó con un 8c, Chronicle Ainé, para apuntárselo. Tres días bien aprovechados.
Aprovechar el tiempo es algo que también le encanta a Ramón Julián. Pasó el día 15 en Montserrat y se anotó unos cuantos puntos rojos. Cria cuervos (8c, tercera ascensión), Nygo-Nyago (8b), Murgola (8b), El senyor de les anelles (8b+, en tres pegues y firmando la segunda ascensión) y Trini Clim (8a+ a la segunda) son las líneas que han caído bajo su cuerda. Ramonet se está acostumbrando a encadenar una gran cantidad de vías en pocos días, y muchas de ellas de 8c o superior. Y con facilidad. Ha llegado a mediados de este año a un gran nivel, demostrando en la roca que continúa explosivo y en la competición (quedaba segundo en la prueba de la Copa del Mundo disputada en Chamonix) que puede competir con lo mejor de la escalada internacional.
Fuente: Yann Corby
Foto de portada: Julius Westphal en Aloha (9a) / Yann Corby