Alex Honnold parece que ya está doctorado en cuestiones patagónicas. Estaba claro desde hacía años que deportivamente tenía poco que demostrar en Patagonia, donde había protagonizado algunas de las cabalgadas más espectaculares en el Fitz Roy y el Cerro Torre, tanto con Tommy Caldwell como con Colin Haley.
Le faltaba exhibirse bajo las célebres condiciones meteorológicas del lugar y tuvo ocasión de hacerlo el pasado viernes 14 de febrero. Una semanita después de que Colin Haley y él ascendieran en el día la Aguja Guillaumet, la Aguja Mermoz y la Aguja Val Biois, decidió realizar una rápida salida en solitario para repetir la vía Thaw’s not Houlding Wright (900 m, 6b+) a la Aguja de l’S, abierta por los británicos Leo Houlding, Kevin Thaw y el estadounidense Cedar Wright en 2004.
No estaba previsto, pero a media escalada se desencadenó una inesperada tormenta de nieve y viento que, no obstante, no detuvo a Alex Honnold. Escaló, hizo cumbre y regresó a casa sano y salvo… El bagaje: casi 40 km a pie (ida y vuelta), 900 metros de vía y un total de 2.300 metros de desnivel.
Este es el relato de la jornada que Alex Honnold ha compartido en sus redes sociales:
Dos días atrás fui a las montañas para escalar Thaw’s not Houlding Wright en la Aguja de l’S (900 m, 6b+ o algo así). La previsión meteorológica era marginal –algunas probabilidades de precipitación a lo largo del día, vientos medios, temperaturas frías– pero parecía correcta para al menos para dar una vuelta por las montañas y ver cómo se desarrollaban las cosas.
Estuvo mayoritariamente soleado (con lluvia) durante el trekking de aproximación, pero después de trepar los primeros 600 metros de pilar empezó a nevar bastante fuerte y los vientos se intensificaron. Pero para entonces parecía más fácil acabar la dura escalada y descender la cara este de l’S que destrepar el pilar y caminar de regreso por el valle del Torre (que siempre es una aproximación laboriosa).
Así que me enrollé a escalar fisuras muy heladas en plena ventisca y conseguí llegar a la cumbre. Afortunadamente, el descenso estaba mucho más protegido y destrepé la histórica cara este hasta el glaciar y luego de vuelta a los caminos normales de trekking.
Terminó siendo poco menos de 12 horas de casa a casa, que es una forma bastante increíble de escalar montañas. Algo así como 2.300 metros verticales y 38,5 km de trekking/jogging para ir y volver. ¡Menudo día!
También querría reconocer que Thaw’s not Houlding Wright es uno de mis nombres de vías favoritos en Patagonia, abierta por mis amigos Kevin Thaw, Leo Houlding y Cedar Wright. Gran vía, cuando no está cubierta de hielo…
La referencia al nombre de la vía tiene que ver con el ingenioso juego de palabras que lo construye, incluyendo los tres apellidos de los aperturistas: thaw significa ‘deshielo’ (también ‘relajación’), holding es ‘resistir’ o ‘mantenerse’ (suena igual que Houlding) y right quiere decir ‘correctamente’ (suena igual que Wright).