Le ha costado 14 pegues y siete días de trabajo, lo que incluye un repaso de limpieza y últimos retoques de equipador a un proyecto (abierto por Manolo del Castillo y José Irigoyen) lleno de telarañas y vecino a Chilam Balam. Adam nos resumió su actividad:
“Trabajé siete días en total en La planta de Shiva. Sorprendentemente encadené justo el día antes de regresar a casa. Me encantó la línea porque ataca el mayor desplome de Villanueva y ofrece gran una variedad y complejidad de movimientos. Los cantos son muy extraños, es difícil encontrarles la forma; muchas de las presas en realidad se componen de varios cantos, uno para cada dedo. El estilo de escalada es completamente diferente al de Chilam Balam, porque en el tramo duro no hay chorreras para descansar. Chilam puede definirse como un pequeño problema de búlder con buenos reposos de empotramientos de rodillas entre medias”.
“La primera parte de La planta es como un 8c de 20 metros de fuerza-resistencia; tienes que escalar tan rápido como puedas, sin fallar, hasta un reposo que no es muy bueno. En los siguientes 20 metros continúa la dificultad, con presas pequeñas, giros de rodilla, la máxima precisión en el trabajo de pies; máxima eficiencia y velocidad al mismo tiempo. El crux lo encuentras como en la mitad de esta segunda parte. Aislado no es demasiado extremo, pero a esa altura llegas lleno de ácido láctico y se convierte en lago muy difícil”.
“Yo creo que es una de las rutas más difíciles que he hecho, posiblemente la más difícil, pero no puedo compararla con Chaxiraxi, ya que el estilo es completamente diferente”.
Las otras propuestas de 9b de Adam Ondra le han costado:
– La Capella (Siurana, Tarragona): 9 días
– Chaxiraxi (Oliana, Lérida): 8 días
– Chilam Balam (Villanueva del Rosario, Málaga): 3 días
– Golpe de estado (Siurana): 11 días
Podéis ver la galería fotográfica en el blog de David Munilla.