Vertiente sur del K2 – Foto: Col. Carlos SoriaDesde el mismo campamento base del K2,CarlosSoria nos ponía al corriente esta mañana del desarrollo de la expediciónmadrileña que él mismo dirige, y que también cuenta con Jorge Palacio, CarlosSuárez y Pepe Hurtado. Llegaron el campo base el pasado 16 de junio, y laúltima hora los sitúa ya por encima de 6.000 metros, con las primeras cuerdasfijas ya instaladas en la Cesen, donde ha comenzado la colaboración paraequipar la ruta entre los grupos de Carlos, AraceliSegarra, y MiguelÁngel Vidal y LuisFraga, últimos en llegar al base del Chogori. Lo han hecho sin problemasrelacionados con el conflicto armado indio-pakistaní, que según Carlos noparece haber mermado la actividad expedicionaria en el Karakorum.
Aunque el tiempo no da demasiados respiros -hoy tampoco lo ha hecho-, el buenacuerdo entre las tres expediciones les ha permitido, por turnos, trabajarvarios días en la montaña. El sábado 22, los grupos de Fraga y Aracelilograron alcanzar los 6.300 metros, después de que Carlos y compañía fijaranlas primeras cuerdas hasta 5.900 m días antes.
Susto inicial
Rutas de la vertiente pakistaní del Chogori – Foto: Col. Carlos SoriaEso sí, la primera aproximación a la montaña terminó con un sustoimportante: una fuerte avalancha de nieve polvo que los cogió de lleno a lospies de la Cesen. Carlos nos aseguraba hoy que no ha hubo consecuenciasgraves, pero la montaña se encuentra muy cargada de nieve con pocaconsistencia, especialmente en altura, lo que aumenta el riesgo de aludes.
Por este motivo los americanos Christine Boskoff y Charlie Fowler hanrenunciado a la Cesen, y se meterán en la cara sur, por una línea paralela ala Kukuczka/Piotrowski, donde JordiCorominas, Jordi Tosas y Mikel Zabalza ya han situado dos tiendas a 5.800 y6.400 m. En su tercera semana en la montaña, el trío vasco-catalán tuvo queparar a causa de la acumulación de nieve, pero ven muy factible su proyecto: laprimera repetición de la vía, sin oxígeno.
Ruta alternativa
Iñaki Otxoa de OlzaArchivo Desnivel
De momento confiesan no haber pasado muchos apuros. Tosas ha comenzado a usarsu tabla de snow, y mientras mejoran su aclimatación, siguen mirando al muro deV+ en roca que los espera a 8.300 m. Su idea es dormir un par de días a 7.000,y después lanzarse a por la cima en estilo alpino. Volviendo a los americanos,forman parte de un grupo comercial de Himalayan Guides, pero no buscarán lacima por los Abruzos como el resto de componentes, donde se incluyenIñaki Otxoa de Olza y el periodista Oscar Gogorza.
Mientras éstos ya han instalado el C1 a 6.200 m, y tienen fijado uno de lospuntos claves de la vía (la chimenea House) gracias a la labor de japoneses ytibetanos, Boskoff y Fowler (que ha coronado el Everest esta primavera) semeterán en la cara sur, e intentarán salir a la normal por el mencionado murosuperior de la Kukuczka/Piotrowski. Forman un binomio muy fuerte: Fowlersuele guiar para Mountain Madness, y Christine es la mujer viva con másochomiles, seis. También es dueña de dicha agencia, que fundó el desaparecidoScott Fischer.
Por último, de quien no hemos vuelto a tener noticias es de OscarCadiach, EloyCallado, EduardSánchez y Lluís Rafols. Siguen aclimatando en el G1 y sufriendo el maltiempo general del Karakorum, pero no hay más detalles. Sus planes era coronarel mayor de los Gasherbrum para meterse después en una de las vías másdifíciles (y no repetida) del K2: la Magic Line checo polaca de 1986.
