El mes pasado, los alpinistas y esquiadores Benedikt Böhm, Sebastian Haag y Greg Hill partían con dirección al Himalaya con las ideas muy claras sobre su plan para intentar una ascensión rápida al Cho Oyu y su posterior descenso con esquís. Todo estaba preparado hasta el más mínimo detalle para intentar completar una actividad montañera de récord… hasta que llegaron a Nepal.
Una vez allí, los dos alemanes y el canadiense comprobaron que las autoridades chinas no estaban dispuestas a permitir su entrada a Tibet, punto de partida de las expediciones hacia la cumbre del Cho Oyu. Una situación que este año han vivido otras expediciones como, sin ir más lejos, la de Carlos Soria, que pretendía el Shisha Pangma.
La expedición de Böhm, Haag y Hill, de hecho, partió hacia el Mera Peak (6.476 m) para realizar una ascensión de aclimatación pensando todavía que les serviría para intentar después el Cho Oyu (8.201 m). Sin embargo, cuando regresaron a Kathmandú desde la cumbre, tras realizar un magnífico descenso de casi 1.500 metros de desnivel, se encontraron con la cruda realidad de la situación.
“Et Tibet estaba cerrado para nosotros”, señalan en la página web de la expedición, “los chinos habían sellado las fronteras a los visitantes. Las informaciones se habían convertido en realidad, con lo que teníamos que abandonar nuestro objetivo original en el Cho Oyu. El Manaslu (8.156 m) se mantenía en nuestra lista de temas pendientes. La montaña es increíble cuando la ves por primera vez. Estuvimos allí una vez antes, en 2007 y quedamos completamente enterrados en nieve. Maldición. Necesitamos buen tiempo”.
Glen Plake, Rémy Lécluse y Greg Costa
Allí han coincidido con otra expedición de alpinistas y esquiadores que pretende conseguir la primera ascensión del Manaslu y descenso en esquís sin oxígeno. Está formada por Glen Plake, Rémy Lécluse y Greg Costa y se encuentran en el campo base de la montaña desde el 1 de septiembre. Ellos optaron por realizar toda la aclimatación mientras equipaban la ruta de ascenso a la montaña.
Según el último comunicado emitido desde el campo base, los tres montañeros Plake, Lécluse y Costa deberían encontrarse ahora mismo en pleno ataque a cumbre. Sus previsiones pasaban por, una vez pasada la tormenta que les obligó a tomarse un paréntesis en su trabajo en la montaña, lanzarse el domingo 16 de septiembre (día en que fecharon dicha comunicación) hacia la cumbre, realizando una ascensión limpia pero a un ritmo más pausado que el de sus rivales en esta particular carrera en el Manaslu. Su intención era avanzar diariamente de campo a campo para intentar alcanzar la cumbre desde el desde el C4 (7.400 m) este mismo viernes día 21.
En el mismo comunicado, informan que Hill, Böhm y Haag llegaron hasta los 7.000 metros antes de que estallara la tormenta y tuvieran que redescender al campo base en malas condiciones. Ese mal tiempo ha generado interrogantes en ambas expediciones con respecto a las condiciones de la nieve y a sus opciones de realizar un descenso integral en esquís.