El récord de velocidad más famoso y emblemático de la historia de la escalada ha sido batido. Sus autores: la cordada estadounidense formada por Brad Gobright y Jim Reynolds, que han conseguido escalar los 900 metros de El Capitan a través de The nose en unas increíbles 2 horas, 19 minutos y 44 segundos.
Los dos escaladores llevaban días apresurándose en la vía y su fabuloso tiempo es producto de varias series de intentos en los que han ido perfeccionando la técnica y la estrategia hasta el mínimo detalle. De hecho, la semana anterior ya se habían quedado cerca del récord, con un tiempo de 2 horas, 34 minutos y 30 segundos, que era ya el segundo mejor de la historia.
En ese momento, solo Hans Florine y Alex Honnold podían acreditar un registro menor, precisamente el del récord vigente. El mayor especialista en escaladas en solo integral acompañó en junio de 2012 al histórico Florine en su séptimo récord en la ruta y establecieron una marca de 2h23’46”. Así pues, el nuevo récord de Brad Gobright y Jim Reynolds recorta en cuatro minutos ese tiempo.
La evolución del récord de The nose
El récord de velocidad en The nose ha venido adquiriendo con el tiempo una notoriedad creciente. Tradicionalmente, algunos de los nombres de mayor prestigio de la escalada en Yosemite han firmado el récord, que empezó a cobrar sentido con la primera ascensión en el día liderada por Jim Bridwell, con John Long y Billy Westbay en 1975. Desde entonces, John Bachar, Peter Croft, Dean Potter, Yuji Hirayama, Alex y Thomas Huber, Dean Potter o Sean Leary han hecho su aportación en un momento u otro.
Según la completa página web de Hans Florine (que marcó su primer récord en 1990 y repitió en 1991, 1992, 2001, 2002, 2008 y 2012), el mejor tiempo en la vía ha experimentado la siguiente evolución con el paso de los años:
1958: 12 días, por Wayne Merry, George Whitmore y Warren Harding.
1960: 7 días, por Joe Fitchsen, Tom Frost, Chuck Pratt y Royal Robbins.
1963: 3 días y medio, por Layton Kor, Steve Roper y Glenn Denny.
1967: 3 días, por Jim Madsen y Kim Schmitz.
1968: 2 días y medio, por Jim Madsen y Mike Covington.
1974: 1 día y medio, por Ray Jardine y Chick Holtcamp.
1975: 17 horas 40 minutos, por Billy Westbay, Jim Bridwell y John Long.
1978: 15 horas, por Mike Lechlinski y John Bachar.
1979: Menos de 13 horas, por Thierry Renault.
1984: 10h47’, por Dave Shultz y John Middendorf.
1986: 10h05’, por John Bachar y Peter Croft.
1988: 9h20’, por Xavier Bongard y Romain Vogler.
1990: 8h06’, por Steve Schneider y Hans Florine.
1990: 6h40’, por Dave Shultz y Peter Croft.
1991: 6h01’, Andres Puhvel y Hans Florine.
1991: 4h48’, por Dave Shultz y Peter Croft.
1992: 4h22’, por Peter Croft y Hans Florine.
2001: 3h59’35”, por Timmy Oneil y Dean Potter.
2001: 3h57’27”, por Jim Herson y Hans Florine.
2001: 3h24’20”, por Timmy Oneil y Dean Potter.
2002: 2h48’50”, por Yuji Hirayama y Hans Florine.
2007: 2h48’35”, por Alexander Huber y Thomas Huber.
2007: 2h45’45”, por Alexander Huber y Thomas Huber.
2008: 2h43’33”, por Yuji Hirayama y Hans Florine.
2010: 2h36’45”, por Sean Leary y Dean Potter.
2012: 2h23’46”, por Alex Honnold y Hans Florine.
2017: 2h19’44”, por Brad Gobright y Jim Reynolds.
Y parece que va sin cuerda…
Ya me diréis qué tiene de triste que se perfeccione de tal forma la técnica de una cordada y se logre algo tan difícil siquiera de imaginar.
I agree with you mmp
And what’s the speed record for playing Beethoven’s IXth? What’s the speed record for saying a prayer? For falling in love? It’s sad to see The Nose, once a symbol of daring and progress, being turned into an arena for this meaningless race.