El pasado 1 de enero se estrenaba Point Break, un remake de la película Le llaman Bodhi de Kathryn Bigelow protagonizada por Keanu Reeves y Pratick Swayze. El nuevo largometraje tiene “un argumento que lleva mucho mas allá el guión y la historia originales”, según publicaba Víctor Riverola en este medio hace unas semanas.
Para que sepamos de lo que estamos hablando, la película trata de un joven que decide dejar atrás su pasado rebelde para unirse al FBI, Johnny Utah (Luke Bracey). Un día, le asignan un caso de espectaculares delitos inspirados por la filosofía ecologista de Ono Ozaki. El objetivo de estos hombres es superar las ocho pruebas con las que, de acuerdo con los preceptos de Ozaki, el hombre puede compensar al planeta por sus excesos. Así conoce a Bodhi (Edgar Ramírez), un chico que le hará ver la vida de otra manera y a Tyler (Teresa Palmer), una joven muy atractiva de la que se enamora.
Las ocho pruebas de Ono Ozaki
El guionista de la película Kurt Wimmer (La prueba -2003-, Desafío total -2012-) inventa el personaje de Ozaki para justificar la realización de pruebas de deportes extremos casi imposibles. Para alcanzar la iluminación prometida por Ozaki, Bodhi y sus hombres deben superar ocho retos, entre los que se encuentran el surf, el salto base, el paracaidismo, el snowboard y la escalada.
Muchos expertos en diferentes deportes rodaron las escenas más peligrosas como dobles de los protagonistas. Víctor Riverola escribía en este medio: “Entre las caras conocidas encontramos al paracaidista Jeb Corliss, el snowboarder Xavier De Le Reu y el profesional de la escalada libre Chris Sharma”. Dani Andrada también trabajó en la película como doble del agente Johnny Utah. Según una entrevista a Chris Sharma en la revista Climbing: “Peter Croft, Brooke Sandahl y Dave Schultz estaban allí. Había mucha camaradería, éramos muchos amigos trabajando en la película. Estaba con mi amigo Dani Andrada escalando, grabando escenas chulas y encontrando líneas preciosas en uno de los lugares más espectaculares del planeta”.
La experiencia de Chris Sharma y Dani Andrada
En la citada entrevista, Sharma habla sobre su experiencia al rodar una superproducción de Hollywood: «No tiene nada que ver con otras películas que he protagonizado como King Lines o Rampage. Para mí es un honor ser embajador de este deporte y compartirlo con el mundo. Estoy muy contento de cómo ha quedado la escena”.
Además habla sobre Dani, quien era Bodhi en sus escenas de acción: “Es gracioso, porque siempre ha sido uno de sus personajes favoritos. Robar un banco siempre ha sido su sueño (risas), realmente se identifica con ese personaje”. El propio Sharma dice que se identifica un poco con los dos personajes, tiene un pie en el mundo de las resposabilidades y otro en el de los sueños. “Siempre intentamos ser fieles a nosotros mismos mientras vivimos en la realidad que nos ha tocado”.
Para Sharma ha sido un privilegio estar en la película, las escenas son “una locura” y asegura que tuvieron que tener mucho cuidado. En sus escenas debían escalar el Salto Ángel de Venezuela, el salto de agua más alto del mundo, en solo integral. Para ello estaba el especialista en escalada en solitario Peter Croft, pero además, en las escenas de Chris y de Dani utilizaron una cuerda fina que fue eliminada en postproducción, según afirman desde Rock And Ice.
Ante todo escalada
Los escaladores pudieron disfrutar de la escalada en el Salto Ángel, pero sobre todo disfrutaron de los cerca de 30 bloques abiertos en Auyantepuy con grados entre 6B y 8A. “Éramos dobles, íbamos disfrazados y llenos de tatuajes falsos, nos escapábamos para escalar, pero seguíamos vestidos de Utah y Bodhi”.
