Angela Eiter es bien conocida como competidora en la modalidad de escalada de dificultad. A sus 28 años de edad y prácticamente retirada de la competición desde hace dos, posee un currículum envidiable que la convierten seguramente en la mejor de todos los tiempos. Se proclamó Campeona del Mundo cuatro veces (2005, 2007, 2011 y 2012) y otras tres veces campeona de la Copa del Mundo (2004, 2005 y 2006), además de ser campeona del Campeonato de Europa 2010 y de los World Games 2005. También en el Rock Master de Arco ha dejado una profunda huella con seis victorias entre 2003 y 2012.

Su trayectoria en roca también ha sido siempre admirable, pero básicamente con la cuerda. De hecho, nunca había trascendido demasiado su actividad como escaladora de búlder. Hasta ahora. Según cuenta en su blog, este verano ha realizado su «primer gran viaje de escalada» con Suráfrica como destino y ha regresado con encadenamientos más que relevantes y habiendo «ganado una gran experiencia», según sus propias palabras. Sus terrenos de juego han sido varios sectores de Rocklands para el bloque y la escuela de Montagu para la cuerda. Por el camino, coincidió además con otros escaladores de primer nivel, como Dave Graham, Alex Megos y Ashima Shiraishi.
Su bloque más duro
Nunca antes Angela Eiter había resuelto un problema de 8B como Fragile steps, en el sector Fortress. «Un bloque que discurre por un inclinado techo de regletas… ¡se adapta a mi estilo bastante bien! La primera vez que lo probé, no pude encontrar ninguna solución, pero después de un tiempo hice todos los movimientos. El siguiente desafío fue conectar las secuencias. Necesité varios intentos hasta que el final, conseguí salir por arriba de mi bloque más duro hasta ahora», escribe en su blog.
De hecho, la austriaca sólo es la novena escaladora del planeta capaz de encadenar un problema de dicha dificultad y la tercera que se sube al club del 8B femenino este verano después de que en junio lo hiciera Brooke Raboutou y en julio Alex Puccio. Para hacerlo, ha elegido la línea más apropiada, puesto que Fragile steps es el problema de 8B con más repeticiones: Dorothea Karalus hizo la primera en 2010, Ashima Shiraishi la repitió en 2012 y Brooke Raboutou también la completó hace un par de meses.
Su mejor flash y los bloques más frustrantes y guapos
Además de haber conseguido encadenar el problema más duro de su carrera, Angela Eiter también ha conseguido otros búlders para recordar. De hecho, se ha batido a sí misma dos veces en el apartado de bloque más duro encadenado al flash. Primero lo hizo con Paula Abdul 7C+, para a continuación superarse con In the middle of the ass 8A.
Por otro lado, también demostró perseverancia para anotarse el que ha calificado como su «búlder más frustrante hasta ahora», en el sector Pakhuis. Allí, estuvo tomando Tea with Elmarie 8A+ durante un montón de intentos, para caer casi siempre en el mismo extraño movimiento. «Finalmente, me harté de él y empecé a buscar otra solución. Encontré una y funcionó! Mi paciencia tomando té con Elmarie finalmente llegó a su final!».
Por último, la escaladora austriaca asegura que Hatchling 8A es la línea más guapa que haya intentado jamás. Un búlder que «es bastante alto y de mucha fuerza de dedos», en el que consiguió salir por arriba al segundo pegue.