El Camino del Cid es una malla de itinerarios turísticos que se inspiran en el destierro de este personaje histórico. El Camino atraviesa, mediante rutas que se van uniendo unas con otras, buena parte de España a lo largo de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón y Comunidad Valenciana por zonas en general poco pobladas, de una gran riqueza natural e histórica.
La red suma más de 1.400 kilómetros y está dividida en cinco grandes bloques: El Destierro, que recorre principalmente el paso del Cid por el viejo reino de Castilla y León; Tierras de Frontera, que recorre antiguos territorios musulmanes; Las Tres Taifas, que transita por tres legendarios reinos de taifas: Zaragoza, Toledo y Albarracín; La conquista de Valencia; y La defensa del Sur: un recorrido histórico siguiendo las rutas defensivas de castillos que nos conducen a Orihuela, lugar más al sur al que el Cid logró hacer llegar su influencia.
Los itinerarios están señalados para hacerse caminando y, con algunas variantes, en bicicleta todo terreno. También pueden hacerse por carretera, siguiendo en un 80 por ciento carreteras secundarias con muy poco tráfico. Esta versión es utilizada por cicloturistas de alforja que prefieren el asfalto al sendero, o bien desean alternar uno y otro.
El Camino del Cid cuenta con una señalización oficial que ya ha sido implantada en el 80 por ciento del itinerario, en concreto en las provincias de Burgos, Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel y Castellón. Su mantenimiento es una prioridad para el Consorcio Camino del Cid, un grupo formado por las diputaciones de Burgos, Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante.
De hecho, refuerza el compromiso de las ocho diputaciones consorciadas por ofrecer un producto turístico «singular, riguroso y de calidad». En este sentido, el gerente de la entidad, Alberto Luque, ha subrayado que la finalidad de estos trabajos es «ofrecer el mejor servicio a los viajeros, facilitarles el paso».
Tras estos trabajos de revisión y reparación de señales se han actualizado y modificado las topoguías, mapas y tracks de cada bloque. En la web del Camino del Cid están disponibles todas las topoguías, mapas a escala 1:25.000 y los tracks para GPS de los itinerarios para senderistas y ciclistas de BTT.
Es decir, en el campo hay 3140 escombros que nadie quitará de aquí a 10 años, cuando estén para el arrastre. ¿Y porqué no 300.000 señales, todas de colorines? Luego viene cuando se masifica, se deteriora, y empiezan a poner regulaciones y tasas… Todo muy coherente. Quiero pensar que el principal motor de estas acciones es activar la economía turística de la zona, pero bien harían en dedicar los recursos a una campaña de promoción, al menos nos ahorraríamos los hierrajos.