Las montañas de la Costa Daurada no solo son un extra para el visitante de esta zona del litoral tarraconense, es también un destino turístico en sí mismo, con parajes de una belleza incomparable, gastronomía tradicional, fiestas ancestrales, ermitas perdidas en rincones de cuento, miradores excepcionales, restaurantes y alojamientos con encanto.
Un territorio que se puede conocer por unas rutas que satisfacen las apetencias de los visitantes más activos.
Cordilleras costeras
Las Montañas de la Costa Daurada se sitúan en la parte interior de la comarca del Baix Camp, una zona donde se encadenan varias cordilleras que abarcan el litoral de oeste a este. Las sierras de Llaberia, de Pradell-L’Argentera y de Prades aportan paisajes muy diferentes, con una rica vegetación mediterránea que se combinan con cultivos de avellano, olivo y vid.
La diferente dureza de las rocas que forman estas sierras han posibilitado la formación de caprichos naturales como los riscos de la Mussara, la cueva de las Gralles, los Avencs de la Febró o la Roca Foradada.
De la naturalidad de este territorio da fe que contenga varias zonas incluidas en el Plan de Espacios de Interés Natural: las Montañas de Prades, las sierras de Pradell-L’Argentera, la sierra de Llaberia, las Montañas de Tivissa-Vandellòs y el espacio natural de la Mare de Déu de la Roca.
Los pueblos se han adaptado sabiamente al escarpado relieve y son parte del paisaje. Son pueblos sobrios, de calles estrechas y empinadas y llenos de rincones encantadores. La Villa de Prades, Pratdip, L’Argentera o Montbrió del Camp son buenos ejemplos de ello.
Salpicando las montañas, muchas veces en parajes de enorme belleza, se levantan ermitas y monasterios cargados de historia. Y es que las Montañas de la Costa Daurada son depositarias de un importante legado histórico y monumental que contribuyen a embellecer su paisaje.
La historia ha sido generosa y son muchas las huellas que ha dejado en estas tierras: torres romanas y sarracenas, templos románicos, góticos, barrocos y renacentistas, arquitectura industrial del siglo XIX…
Un elemento patrimonial a resaltar son las construcciones de piedra seca, técnica constructiva muy arraigada en el territorio. Es especialmente interesante el grupo de barracas de piedra seca de Mont-roig del Camp que han sido declaradas Bien Cultural de Interés Nacional.
Tradiciones a flor de piel
El encanto rural de las Montañas de la Costa Daurada se manifiesta también en sus tradiciones y en sus muestras de cultura popular, siempre ligadas al entorno. La gastronomía es a menudo el eje vertebrador de las fiestas populares del territorio.
El interior del Baix Camp ofrece una gran diversidad de productos y de formas de prepararlos. Los restaurantes y los artesanos alimentarios aprovechan los productos de calidad para poner al alcance de todos una oferta gastronómica inigualable.
La esencia del territorio se sintetiza en productos como la Avellana de Reus DOP, el Aceite Siurana DOP, la Patata de Prades IGP o la exquisita Miel de Prades. A este respecto hay que resaltar que en las Montañas de la Costa Daurada hay un notable número de pequeños agricultores, ganaderos, viticultores, apicultores, etcétera, muy comprometidos con los medios de producción sostenibles.
Como resume uno de ellos, el avicultor Arnau Sabaté, “ Quienes nos dedicamos a las producciones ecológicas sabemos que somos nosotros quienes debemos adaptarnos a los ciclos naturales y no al revés”.
+
INFO
Toda la información para organizar la estancia en Montañas de la Costa Daurada en www.muntanyescostadaurada.cat
Caminando por las montañas de la Costa Daurada
La red de caminos del Baix Camp permite descubrir el territorio a un ritmo tranquilo, disfrutando del paisaje, de sus pueblos y de su gente. Son caminos que hasta principios del siglo XX eran las únicas vías de comunicación entre los pueblos.
Estos caminos hablan de la historia, de agricultores y de esfuerzo, de ejércitos y de bandoleros, de la memoria colectiva ligada a este territorio y a su gente. Caminar por el Baix Camp constituye un placer para los sentidos, una experiencia para disfrutar de la naturaleza, del paisaje cultivado y del sabor de sus productos de alta calidad.
UNA SUGERENCIA
CUATRO PAISAJES Y UN CAMINO
El Baix Camp esconde cuatro pequeños países, cuatro paisajes bien diferenciados con mil y una montañas que constituyen todo un anfiteatro natural con vistas al mar: la rocosa montaña mediterránea de la sierra de Llaberia, con la misteriosa leyenda de los Dips, los caminos de la Baronía de Escornalbou, las llanuras cultivadas de avellanos, olivos y almendros entre pequeños cerros boscosos, y las Montañas de Prades, con una cima de más de mil metros de altura.
La ruta senderista Cuatro paisajes y un camino es el mejor medio de conocer la comarca a fondo. Es un itinerario largo y (88,7 km) que se propone recorrer en seis etapas. Tiene sus extremos en Pradtip y Capafonts y se puede recorrer en ambos sentidos.
+
Buscador de rutas en: https://bit.ly/buscarutas
En bici por las montañas de la Costa Daurada
Montañas de la Costa Daurada tiene multitud de caminos, pistas y carreteras tranquilas que satisfarán las apetencias de los aficionados a las dos ruedas.
El Baix Camp no tiene una red de rutas específicamente diseñadas para bicicletas de montaña, pero muchos de los itinerarios de la red de caminos del Baix Camp se pueden recorrer con bicicleta de montaña. En la ficha técnica de las rutas se anota esta circunstancia.
UNA SUGERENCIA
LA RUTA DEL ACEITE
La aceituna arbequina, que es la mayoritaria en el Baix Camp, produce un aceite de excelente calidad. Suavidad, complejidad, elegancia y un punto picante en su sabor hacen de este producto un auténtico tesoro de la gastronomía.
Basándose en este producto se ha diseñado un recorrido que recorre siete villas productoras de aceite. El itinerario suma 50 kilómetros, es circular y transcurre por caminos aptos para todo tipo de ciclistas. En ruta se pueden visitar cooperativas, molinos, museos y centros de interpretación. Y desviándose unos pocos metros se pueden visitar otros puntos de interés como los edificios modernistas de Reus, la casa familiar de Gaudí en Riudoms, el casco antiguo de Vinyols, los relojes de sol de Montbrió del Camp, las torres de l’Arbocet, las casas señoriales de Vilanova de Escornalbou, el Mas Miró o alguna barraca de piedra seca de Mont-roig o la villa marinera de Cambrils, entre otros muchos.
+
El track está disponible en: https://bit.ly/rutadelaceite