La principal innovación de este dispositivo de aseguramiento asistido es que es bidireccional, es decir, que funciona para ambos lados independientemente de la dirección de la carga, “eliminando por tanto una de las causas más comunes de los accidentes de aseguramiento”, comentan desde Wild Country.
El sistema se basa en una polea que, en caso de caída, empieza a girar rápidamente y gracias a la fuerza centrífuga activa una pequeña leva interior que la bloquea, deteniendo por tanto la cuerda. Todo el mecanismo (pendiente de patente) es interno y funciona de forma automática, sin la necesidad de manipular ningún tipo de palanca o elemento adicional. La instalación de la cuerda es muy intuitiva, siguiendo el principio de las cestas o tubos tradicionales, por lo que es igualmente válido tanto para el escalador experto como para el principiante, con la ventaja adicional de que funciona igual para ambos lados. “Estas características lo convierten en el dispositivo de aseguramiento más seguro del mercado” afirman desde la marca.
Según pudimos comprobar en su lanzamiento oficial ante un grupo de periodistas especializados el pasado 26 de mayo en Sheffield (donde se encuentra la sede de Wild Country), con pruebas tanto en rocódromo como en la arenisca del Peak District, el dispositivo presenta un manejo muy fluido, permite una detención dinámica y, al contrario de lo que pueda parecer, no se bloquea cuando hay necesidad de dar cuerda rápido al que escala de primero. Una vez se bloquea, para liberarlo basta con tirar ligeramente de la cuerda hacia abajo para desbloquear el sistema y seguir utilizándolo normalmente. Como en todos los dispositivos de frenado asistido su manipulación exige el contacto continuo del asegurador con la cuerda, sin soltar en ningún momento la mano de aseguramiento de la cuerda.
Sus diseñadores, los ingenieros de Wild Country Egon Resch y James Wilson, cuentan que ha sido un largo camino de tres años de investigación. “Al principio nadie creía en la idea”, comenta Egon, “ha sido un duro proceso de ir convenciendo y probando hasta dar con la solución definitiva, después de unos treinta prototipos”. Para la marca, el Revo supone la segunda gran innovación en su historia tras el lanzamiento hace casi tres décadas de los primeros friends (diseñados por los pioneros norteamericanos Ray Jardine y Mark Vallance y fabricados por Wild Country en 1977).
El Revo no estará disponible en las tiendas hasta principios del próximo año, por un precio de venta aproximado de 100 euros.
Otros datos del REVO de Wild Country:
- Peso: 245 gramos.
- Apto para cuerdas de entre 8,5 y 11 mm.
- Certificación: EN 15151-1
- Compatible con cualquier mosquetón de seguridad del mercado.
Vídeo oficial de la marca que muestra el mecanismo interno, donde se puede comprender fácilmente su funcionamiento.
The Revo from Wild Country on Vimeo.