Más de dos millones de euros es lo que ha invertido el grupo Aramón en las cinco estaciones de esquí aragonesas que explota de cara a la próxima temprada. La mayor novedad es la ampliación de la estación de Cerler que añade cuatro kilómetros de pista a los 270 que sumaban
Las cifras fueron presentadas por el director general de Aramon, Javier Andrés, el pasado jueves 27 de octubre, durante la tradicional presentación de novedades que el grupo hace en las semanas previas a la inauguración de la temporada de esquí.
Aramón, grupo que está formado por el Gobierno de Aragón e Ibercaja a partes iguales, explota cinco de las siete estaciones de esquí que hay en Aragón: Formigal, Cerler, Panticosa, Javalambre y Valdelinares. Astún y Candanchú sone explotadas por empresas privdas.
Según cifras del grupo, Aramón lleva invertidos 160 millones de euros desde el 2004 hasta el momento. La inversión ha conseguido que el número de esquiadores crezca desde los 624.000 del 2004 hasta los cerca de 1.200.000 de la pasada temporada, una cifra que el director general confía que se supere este año pese a la crisis.
En la presentación también se habló de los beneficios económicos que las estaciones de esquí producen en las comarcas en que se encuentran. Según Javier Andrés, cada uno de los más de un millón de esquiadores que el año pasado pasaron por las estaciones del grupo se gastó una media de 86 euros por día, lo que supuso unos ingresos de 173 millones de euros.