Las difíciles condiciones del invierno pakistaní han terminado con las ilusiones de la pareja de alpinistas polacos Tomasz Mackiewicz and Marek Klonowski por convertirse en la primera expedición en alcanzar la cumbre de uno de los ochomiles de ese país en invierno. Según informa ExplorersWeb, que cita fuentes de la agencia Adventure Pakistan, Mackiewicz y Klonowski han decidido regresar a Islamabad desde el C1 del Nanga Parbat.
Siguen pues el mismo camino que el ruso Sergey Tsygankov, que también se había marcado el Nanga Parbat como objetivo para este invierno, aunque tuvo que abortar su expedición en solitario debido a una enfermedad pulmonar cuando había alcanzado el mismo punto en el C1.
Moro, Urubko y Richards, en el C2 del G-II y subiendo
La expedición formada por Simone Moro, Denis Urubko y Cory Richards no arroja la toalla, ni mucho menos. Los tres alpinistas alcanzaron ayer el C2 de su ruta al Gasherbrum II. Más exactamente, instalaron la tienda a una altura de 6.250 m, en una pared cercana a ese campo 2. Según los datos expresados en la web de la expedición, necesitaron una jornada para superar 250 metros de desnivel. Un dato que da buena cuenta de las tremendas dificultades que estos expertos alpinistas están afrontando y que Moro explica comparando el avance con el abrir una trinchera de varios kilómetros de longitud.
Sus planes pasan por continuar todavía hacia arriba, para intentar pasar la noche alrededor de los 7.000 metros. Después, desharán el camino hasta el campo base, para recuperarse y repensar la estrategia, en función del grado de aclimatación que hayan conseguido.
Los polacos también alcanzan el C2 del Broad Peak
La expedición polaca del Broad Peak, liderada por Artur Hajzer, mientras tanto, también ha alcanzado el nivel del campo 2. De hecho, dejaron allí un depósito de material el domingo, para regresar en seguida al campo base, huyendo de unas sensaciones térmicas inhumanas de entre -50ºC y -60ºC, resultado de un intenso frío y un viento constante.
Posteriormente, ya ayer lunes, Artur Hajzer y Marcin Kaczkan cogieron el relevo y se desplazaron hasta el C1, para mejorar su aclimatación pasando una noche en altura. En declaraciones a ExplorersWeb, el propio Hajzer señaló la dura situación que vive su equipo por culpa del frío extremo: “Mientras trabajábamos para ampliar el campo base, nuestras manos se entumecían por el frío y nuestros dedos llegaban al límite de sufrir congelaciones”, señalaba. El líder de la expedición polaca, que parece estar en contacto por radio con el campo base del G-II, confiaba en que “Simone Moro y Denis Urubko conquistarán el G-II en cualquier momento”.
Camino del CB del Hidden Peak
Mientras tanto, la última expedición en la pugna por el primer ochomil invernal ya se encuentra en ruta hacia el campo base del G-I. De hecho, Louis Rousseay, Gerfried Göschl y Pierre Masson (responsable del campo base) llegaron a Islamabad el viernes y ya se encuentran en Skardú. Allí esperan la llegada de su tercer alpinista, el vasco Álex Txicón, que viajó a Pakistán el domingo y se le espera en Skardú en breve.
Todos juntos iniciarán el camino hacia el campo base del Gasherbrum I, que realizarán en buena medida a pie, en un trekking de aproximadamente una semana, contrariamente al resto de expediciones, que han preferido ser trasladadas hasta allí en helicóptero.
