Martín Ramos ha anunciado hoy en sus redes sociales que ayer consiguió alcanzar la cumbre del Manaslu (8.163 m). Coronó hacia las 11:00 hora local y a continuación descendió hasta el C3 para pasar la noche allí. Hoy ha retomado el descenso sano y salvo hasta el campo base, desmontando por el camino el C1. Se trata de la décima cumbre de los catorce ochomiles en la trayectoria del alpinista zamorano, una vez más acompañado por Jorge Egocheaga.
El plan del exitoso intento de los dos españoles comenzó el 26 de septiembre, con la salida de Martín Ramos hacia el C1. Al día siguiente, lo hacía Jorge Egocheaga, con la intención de encontrarse en el C3. Una vez allí, su intención era descansar unas horas e hidratarse bien para continuar hacia la cumbre el 28 de septiembre. Todo ha salido a la perfección, a pesar de las dificultades superiores a las esperadas que hallaron entre C3 y C4.
Entrada de mal tiempo, una fallecida
De hecho, Martín Ramos ha sido una de los alrededor de cien personas que han hecho cima en el Manaslu durante esta ventana de buen tiempo, que se ha cerrado hoy con la entrada de mal tiempo. La mayoría de partes meteorológicos ya preveían este deterioro, aunque parece que algunos alpinistas se habrían visto atrapados en cotas altas.
De hecho, a su llegada al campo base se habrán enterado de las noticias acerca del fallecimiento de una alpinista estadounidense hoy mismo, entre el C4 y el C3. Todavía no se ha dado a conocer su identidad ni las circunstancias exactas de la muerte, aunque sí ha trascendido que no iba acompañada por sherpas personales.
La trayectoria de Martín Ramos
Tras una primera expedición al Cho Oyu en 1997, Martín Ramos inició su trayectoria en los ochomiles con la cima del Shisha Pangma (1998). Estuvo viajando casi cada año a las grandes montañas del planeta hasta 2014 y, durante ese periodo de tiempo, fue sumando ochomil tras ochomil.
En 2001, llegó la ascensión que verdaderamente puso a Martín Ramos en el camino del ochomilismo, con el Everest. Formó parte de la primera expedición castellano-leonesa que alcanzó el techo del mundo. También fue el único ochomil que subió con ayuda de oxígeno suplementario.
Después vendría el Cho Oyu (2002), el Nanga Parbat (2005), el Gasherbrum II y el Broad Peak (ambos en 2008), el Annapurna (2010) y el Makalu (2011). Su expedición con Jorge Egocheaga al Kangchenjunga 2012 se vio truncada por una avalancha que les provocó heridas leves y les obligó a abandonar. De todos modos, volvieron en 2014 para, esta vez sí, coronar el Kangchenjunga, la tercera montaña más alta del planeta.
Con la cumbre del Manaslu, que llega siete años después que la del Kangchenjunga, para cumplir el sueño de los Catorce le faltan el K2, el Gasherbrum I, el Dhaulagiri y el Lhotse.