El Manaslu (8.163 m) ha cogido este otoño el testigo del Everest en primavera. Hasta la octava montaña más alta del mundo se han desplazado centenares de personas, integrantes de numerosas expediciones comerciales. Alan Arnette calculaba el pasado viernes que ya habían alcanzado su cumbre más de 200 personas esta temporada, todas por la ruta normal.
Récord de velocidad
Entre ellas, destaca el récord de velocidad realizado por François Cazzanelli. Este alpinista y guía alpino de Cervinia de 29 años estaba integrado en una expedición italo-suiza que llegó al Manaslu con el objetivo de completar la primera repetición de la ruta que abrieron en otoño de 1986 los polacos Jerzy Kukuczka y Artur Hajzer por la parte izquierda de la cara noreste y la arista este.
Después de que el mal tiempo y las condiciones desfavorables les obligaran a olvidarse de su proyecto, se centraron en ascender por la ruta normal. François Cazzanelli decidió intentarla en un estilo rápido y ligero. Junto con el suizo Andreas Steindl, partió a las 21:00 horas del campo base. En 4:15 horas ya había alcanzado la altura del C3 (6.780 m) y las 8:30 horas de ascensión llegaba al C4 (7.400 m).
Por encima del C4, Cazzanelli y Steindl dieron alcance a sus compañeros de expedición Francesco Ratti, Emrik Favre y Marco Comandona. A partir de ese punto, se han dado libertad para seguir cada uno su propio ritmo. François Cazzanelli y Marco Comandona alcanzaban la cima a las 10:00 de la mañana (tras 13 horas de ascensión). Otras 4:43 horas lo dejaban de nuevo en el campo base, para un tiempo total de 17 horas y 43 minutos para completar los 44 km de distancia y 3.280 metros de desnivel positivo del trayecto CB-cima-CB.
Por su parte, Andreas Steindl llegaba también a la cima alrededor de mediodía con Emrik Favre y Francesco Ratti. El suizo completó la ascensión en unas 15 horas y la aventura entera, con el descenso, en 21 horas y 30 minutos.
Hasta ahora, el récord de velocidad en el Manaslu correspondía a Andrzej Bargiel, quien en 2014 lo ascendió en 14 horas y 5 minutos y completó el ascenso y descenso desde el campo base en 21 horas y 14 minutos.
François Cazzanelli y Andreas Steindl ya tenían experiencia en ascensiones exprés, como demostraron el año pasado en el Cervino, donde hicieron cordada para subir y bajar las cuatro aristas en 16 horas.
Muerte durante el descenso
En otro orden de cosas, el Manaslu registraba la triste muerte de Rita Bladyko, alpinista polaca de 50 años de edad. Según parece, fue hallada sin vida en los alrededores del campo 3 durante su descenso desde la cumbre.
Según medios de comunicación de Polonia, Bladyko comenzó a sentirse mal ya en el campo 4 y fue ayudada a descender por sus sherpas hasta el C3. Al día siguiente fue hallada sin vida, sentada delante de su tienda, según el testimonio de la alpinista también polaca Magda Gorzkowska.