Nirmal Purja anda ya de camino al Shisha Pangma (8.027 m), donde pretende cerrar su Project Possible 14/7, ascendiendo el último ochomil principal que le queda pendiente en menos de siete meses. Antes de llegar a su campo base, ha tenido que hacer frente a una odisea burocrática para obtener un permiso extraordinario de ascensión, puesto que las autoridades chinas habían decretado el cierre absoluto de la montaña este otoño.
El cierre del único ochomil situado totalmente en suelo chino se argumentaba desde el Tibet por el riesgo inasumible que supone hoy en día ascender el Shisha Pangma. Algunos analistas apuntan que era más bien una excusa para evitar protestas alrededor de la celebración del 70 aniversario de la fundación de la República Popular de China.
¿Tiene razón el gobierno chino? ¿Se ha convertido el Shisha Pangma en una montaña demasiado peligrosa? Analizamos en este artículo cuáles son los riesgos del decimocuarto ochomil del planeta.
Falsa sensación de facilidad
No existe ninguna duda de que el Shisha Pangma ofrece una falsa sensación de facilidad y seguridad. El hecho de que sea el ochomil más bajo y de que su campo base sea accesible en vehículo puede hacer creer a muchos que su cumbre es asequible. Sin embargo, las estadísticas no están de acuerdo con esa presunción: la cumbre principal del Shisha Pangma no resulta sencilla de alcanzar, pues la ruta más evidente desde la cara norte (la normal) conduce a la cumbre Central (8.008 m) y obliga a una delicada travesía por una arista afilada como un cuchillo que hay que salvar a horcajadas. Fue la ruta de la primera ascensión china de 1964 (el último ochomil en ser coronado).
Por esa razón, muchas ascensiones al Shisha Pangma se quedan en la cumbre Central y no continúan hasta la cumbre principal, incluso algunas que reclaman haber coronado el pico más alto. Por supuesto, quien desee competir en los catorce ochomiles, debe llegar hasta los 8.027 m del pico principal.
Como el estado de la arista es una incógnita situada a 8.000 metros y puede comprometer el acceso a la cumbre principal de forma decisiva, existen hasta tres variantes que ofrecen una travesía a menor cota para enlazar con la arista este e ir a la cima desde allí. En 1980, los austriacos Ewald Putz y Egon Obojes fueron los primeros en completar este recorrido; los rusos Sergei Bogomolov y Vladimir Oleynik abrieron otro con una travesía más abajo en 2002; e Iñaki Ochoa de Olza trazó una entre las dos anteriores en 2006.
31 muertos
La tasa de mortalidad del Shisha Pangma tampoco es de las más tranquilizadoras de los ochomiles. De hecho, se sitúa en la zona intermedia de los Catorce: ha recibido unas 350 ascensiones en toda la historia y ha registrado 31 muertes. La peor tragedia ocurrió en mayo de 1991, cuando cuatro alpinistas alemanes desaparecieron por culpa de una avalancha.
Las desapariciones más sonadas fueron las de los estadounidenses Alex Lowe y David Bridges en 1999. También levantaron mucha polvareda los fallecimientos de Sebastian Haag y Andrea Zambaldi en 2014 por una avalancha, en un episodio con algunos clarooscuros que afectaron a sus compañeros de ascensión Benedikt Böhm, Ueli Steck y Martin Maier, que salvó la vida de milagro. La última víctima del Shisha Pangma data de la primavera de 2018, cuando desapareció el experimentado alpinita búlgaro Boyan Petrov, que buscaba en solitario su undécimo cohomil sin oxígeno.
Las grietas en el glaciar de la parte inferior de la ruta y las avalanchas en las laderas de los alrededores del C3 son los puntos calientes del riesgo objetivo en el Shisha Pangma, además de la citada arista cimera.
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Suena a excusa cachonda que el gobierno Chino diga que cierra una montaña por el riesgo que conlleva escalarla? A cado no conlleva riesgo escalar el Everest?
Como bien se cita en la noticia, se cumple el 70 aniversario de la fundacion del PPC y el 60 aniversario de la ocupacion del Tibet. Segun Amnistia Internacional, el Tibet es la segunda region del mundo despues de Siria donde menos se respetan los derechos humanos.
Todo parece indicar que el cierre de las montañas tibetanas tiene mas motivacion politica que cualquier otra. China no quiere que nadie sepa que esta pasando dentro del Tibet