Los chilenos Cristóbal Señoret y Max Didier, y la alemana Carolina North realizaron durante los meses de junio y julio una interesante expedición al Himalaya indio. Su objetivo principal era intentar «abrir una línea en el monte Kishtwar Shivling en roca, pero finalmente las condiciones en esta montaña no eran las más óptimas, debido a la cantidad de nieve», explica Cristóbal Señoret.
Y eso que lo llevaban todo bien preparado. Carolina North había recibido una información bien detallada acerca del lugar y su potencial por parte de Stephan Siegrist, quien había logrado la primera y hasta ahora única ascensión del Kishtwar Shivling. El equipo realizó una aproximación a pie de tres días hasta alcanzar el remoto valle de Darland, donde instalaron el campo base en un espectacular anfiteatro de agujas de granito salpicadas de hielo y nieve.
Tres días para escalar el Monte Iñaki
Tras descartar el Kishtwar Shivling, los aventureros decidieron «desde el mismo campamento, escalar una arista que recorría la cara sureste de una hermosa pared inescalada«, según la narración de Cristóbal Señoret. «Escalamos con un estilo alpino de estrategia para tres días, con el objetivo de encontrar algo para poder pasar la noche en la pared, en alguna terraza cómoda, que finalmente encontramos a mitad de vía en una increíble repisa para poder pasar la noche y montar un increíble vivac», añade.
Cristóbal Señoret, Max Didier y Carolina North necesitaron un total de «cuatro días desde el campo base y tres días en la pared: dos días para escalar la arista y un día para rapelar el monte, utilizando stoppers en la mayoría de los anclajes para los rápeles», detalla el alpinista chileno.
Durante ese periplo, «lo más difícil fueron las placas, escalamos fisuras de hasta 7a y muchas de 6c, pero nos encontramos con la arista sellada en el segundo día de escalada. Logramos poner dos bolts de progresión cada 15 metros para luego encontrar una fisura perfecta de 7a. Este fue uno de los largos más duros y que nos tomó más tiempo. Finalmente, es un largo hermoso de placa por La arista de los sueños, de 7a expo».
Al final, La arista de los sueños consta de 17 largos (700 m, 7a, A0 R), en los que los aperturistas instalaron 1 pitón y 4 bolts. «Debido a la exposición de caída, de los 17 largos que escalamos, el L5, L6 y L7 son expuestos, lo demás es de alta calidad«, concluye Cristóbal Señoret.
En memoria de Iñaki Coussirat
Cristóbal Señoret, Max Didier y Carolina North convinieron en bautizar el pico virgen escalado con el nombre de Monte Iñaki, en memoria del alpinista argentino Iñaki Coussirat, fallecido el pasado mes de enero en un accidente de escalada en el Fitz Roy. Cristóbal Señoret mantenía una buena amistad con Coussirat, con quien había compartido el enlace de las tres Torres del Paine en 2015, en cordada junto a su hermano Juan Señoret.
Agujas vírgenes en el Zanskar
La expedición de Cristóbal Señoret, Max Didier y Carolina North no acabó con la ascensión del Monte Iñaki. En ese mismo anfiteatro escalaron algunas agujas, como la Aguja Pachamama (5.300 m), donde abrieron las vías El diedro (7a) y Bahut Achchhalaga (250 m, 6b).
Posteriormente se trasladaron al valle de Zanskar, repleto también de agujas de granito, ya en el mes de julio. Allí también escalaron varias agujas, entre las que destaca la primera de la virgen Punta Diamante (5.200 m), realizada a través de La de los chachas (200 m, 6a).