El movimiento en el Karakourm empieza a dar sus frutos. Los alpinistas asturianos Jorge Egocheaga y Rafael Belderraín, conjuntamente con el montañero zamorano Martín Ramos, alcanzaban la cima del Gasherbrum II durante la mañana del domingo, doce días después de su llegada a la base de la montaña pakistaní. Los tres expedicionarios ascendieron sin sobresaltos y hollaron los 8.035 metros en torno a las 9 de la mañana. Sería descendiendo cuando se encontrarán con los problemas, debiendo superar una fuerte nevada que les obligó a refugiarse en el tercer campo de altura, a 7.050 metros. Haciendo uso de su amplia experiencia mantuvieron el tipo a pesar del desgaste físico y a las 12 de la mañana del lunes llegaban al campo base, a 5.200 metros en el glaciar de los Abruzzos.
El GII era una cima relativamente asequible hace unos diez años, aunque en la actualidad exige un enorme compromiso debido a los cambios en su superficie originados por el calentamiento global. Hoy, la montaña se encuentra muy agrietada y con gran cantidad de resaltes y seracs, sin olvidar un creciente riesgo de avalanchas. La primera parte de la ascensión se produce por la Cascada de Hielo del glaciar meridional de los Gasherbrum. Entre cinco y siete horas puede llevar el trayecto hasta el campamento I dada la existencia de grietas, resaltes, seracs, lagunas glaciares y aludes. A partir de ahí, la ascensión continúa por el espolón Moravec con una fuerte pendiente que, por tramos, supera los 60º de inclinación. El campo II se instala a 6.450 metros en un rellano resguardado y el campo III algo más arriba por la misma arista (7.050metros) que suele equiparse con cuerdas fijas para asegurar el descenso en caso de mal tiempo. El último tramo hasta alcanzar la cumbre se realiza por una larga travesía en diagonal hacia la arista este con una complicada banda rocosa en los últimos 50 metros.
Para Jorge Egocheaga el GII supone su noveno ochomil (Everest, Gasherbrum I, Cho Oyu, Nanga Parbat, Shisha Pangma, Manaslu, Broad Peak, Dhaulagiri y Gasherbrum II), para Rafa el segundo (GII y una cumbre secundaria del Broad Peak) y el quinto para el zamorano Martín Ramos, en cuyo haber ya había un intento al Gasherbrum II en 2004. Ahora, Egocheaga y Ramos podría plantearse, si la forma física y el genio del Karakorum lo permiten, intentar el K2 en las próximas semanas.
En el Gasherbrum IV, Jose Carlos Tamayo y Juan Vallejo, miembros de una expedición nacional de cinco miembros, podrían lanzar el ataque definitivo en los próximos días, como comunicaron cuando visitaron el campo base del Broad Peak para celebrar los San Fermines.