Benedikt Böhm ha llevado a cabo una ascensión y descenso exprés en el macizo del Dhaulagiri. Concretamente, el alpinista y esquiador alemán ha ascendido y descendido del Dhaulagiri VII en menos de 8 horas. Su actividad, llevada a cabo el martes 15 de octubre, comenzó en el campo base (4.900 m), pasó por la cima (7.246 m) y concluyó de nuevo en el campo base. En total, invirtió 7 horas y 53 minutos.

En esquís
La clave de la ascensión está en el uso de los esquís y la buena aclimatación. Benedikt Böm llegó a Nepal el 26 de septiembre, llevó a cabo la aproximación hasta la base de la montaña con un trekking de cinco días que le permitió adaptarse a la altura paulatinamente. Y posteriormente llevó a cabo un concienzudo trabajo de aclimatación antes de lanzarse a por su objetivo.
Según narró él mismo al concluir su periplo a la carrera por el Dhaulagiri VII, tuvo la opción de llevar a cabo toda la aventura con los esquís puestos. Esta montaña está considerada como uno de los sietemiles más fáciles de Nepal, con una amplia vertiente nevada donde un experimentado esquiador de montaña en buena forma física puede progresar con velocidad.
Eso sí, a decir de Benedikt Böhm, las condiciones de la nieve que se encontró no eran nada fáciles y no admitían el menor descuido: texturas diferentes y cambiantes, incluidas secciones completamente heladas exigían la mayor de las atenciones.
De tres días a 8 horas
El Putha Hiunchuli –denominación por la que suele nombrarse el Dhaulagiri VII– fue ascendido por primera vez en 1954, a cargo del explorador británico James Owen Merion Roberts y Ang Nyima Sherpa. Su ruta normal, por la vertiente norte, forma parte del catálogo de muchas agencias de trekking en Nepal. La ascensión, de unos 20 km de distancia y un desnivel positivo de unos 2.346 m, suele dividirse en cuatro jornadas e incluye la instalación de tres campamentos de altura a 5.400 m, 6.200 m y 6.600 m.
Aunque la del Putha Hiunchuli no será la actividad de su vida, Benedikt Böhm es un consumado especialista en ascensiones rápidas a grandes montañas. Suyo fue el primer descenso integral en esquís del Manaslu (8.163 m), en 2012, y también figura entre quienes han descendido desde la cima del Gasherbrum II (8.034 m), en 2006.
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