La riqueza del subsuelo aranés en esfalerita -mineral del que se extraía el zinc- favoreció la apertura de numerosas explotaciones mineras desde finales del siglo XIX que fueron quedando abandonadas según se explotaban los filones. Las minas Victòria, en Arres, fueron una de ellas.
Una sencilla excursión que comienza en la Bassa d’Arres permite descubir restos de edificios, vagonetas, bocaminas y otras infraestructuras de estas minas. Incluso se ha recuperado la Sala de Máquinas como centro de visitantes, a partir de donde se inicia una visita guiada por una galería restaurada de 200 metros de longitud, donde se pueden ver los diferentes métodos de explotación del mineral (entibaciones, cargadores, galerías de explotación…); una visita que encanta a los niños y no tan niños.
Esta es una excursión muy interesante tanto por transcurrir por un precioso bosque de abetos como por descubrir cómo funcionaba una mina y las duras condiciones de vida de los mineros. Si se desea, se puede alargar la ruta comenzando en la población de Arres de Sus.
Una actividad que resulta una pequeña aventura para los críos es viajar en un telesilla. Esta temporada la estación de Baqueira Beret no abrirá el telesilla Blanhiblar, como venía haciendo, pero sí los telesillas del Bosque y del Clòt der Os, y preparará varios caminos fáciles para que los caminantes y ciclistas —las sillas dispones de un sistema para transportar bicicletas— puedan ir de Baqueira a Beret y viceversa. También se adecuará un camino desde el Clòt der Os hasta los lagos de mismo nombre.
Otra “aventurilla” que pondrá de buen humor a los niños será viajar hasta la Artiga de Lin en un pequeño tren pintado de rojo. Esta iniciativa fue puesta en marcha por el Conselh Generau d’Aran para regularizar el acceso motorizado en la Ribera del Joèu.
Los vehículos no autorizados deben estacionarse justo antes de la ermita de la Virgen de la Artiga de Lin donde se ha instalado una caseta de información donde se puede subir al tren.
¿Y qué tal llenar una tarde visitando la Mòla de Salardú? Es un molino harinero que ya aparece documentado en 1613 y que estuvo moliendo cereal hasta el final de la Guerra Civil. La Mòla representa el prototipo de molino aranés: una construcción de una sola planta, construida con piedra, madera y pizarra.
En su interior se conserva la maquinaria y gracias a la restauración efectuada tenemos la oportunidad de ver cómo funciona accionado por la fuerza del agua. Junto al molino hay un bonito parque infantil donde se puede finalizar la visita con una merienda.
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Info en Visitas Patrimonio https://www.visitvaldaran.com/
Ruta del Románico de la Val d’Aran
Cualquier momento del año es bueno para hacer la Ruta del Románico de la Val d’Aran, un itinerario que visita trece iglesias, de las que cinco tienen categoría de obra maestra del románico aranés: Santa Maria de Arties, Sant Miquèu de Vielha, Sant Andrèu de Salardú, Era Mair de Diu dera Purificacion de Bossòst y Santa Eulàlia de Unha. Pero el momento más idóneo es el verano, que es cuando el departamento de Cultura del Conselh Generau d’Aran organiza visitas guiadas a estas quince iglesias.
Música Divina
Otro modo distinto de conocer el románico aranés es asistir a los conciertos del festival Romanic musicau, que se celebra todos los veranos desde hace 23 años. El festival lo componen una serie de conciertos gratuitos de música —clásica mayoritariamente— que se ofrecen en diferentes iglesias. Antes de que arranque la música, un experto explica las características arquitectónicas y el legado histórico del templo.