El refugio Victory, en Los Galayos, una zona de escalada de la zona centro muy popular, tiene una pequeña plataforma a su lado que utilizan los helicópteros de rescate para aterrizar. Cada vez que un aparato hace esa maniobra los presentes se echan a temblar pues el «helipuerto» es tan reducido que las aspas giran muy cerca del edificio.
El pasado 25 de abril sucedió lo que se temía. Un helicóptero de los Grupos de Rescate de la Guardia Civil que iba a evacuar a un escalador herido golpeó su hélice contra el refugio. Milagrosamente, nadie salió herido, ni la tripulación del aparato ni los montañeros que se encontraban allí y que fueron literalmente bombardeados por los trozos de hélice y material del refugio.
El helicóptero accidentado quedó afortunadamente en el borde de la terraza sin llegar a caer, pero su situación de equilibrio era tan apurada que fue necesario atarlo literalmente al refugio por medio de cuerdas.
Y allí permaneció hasta que el pasado 3 de mayo fue izado en una espectacular maniobra por un helicóptero de carga Chinook de dos rotores.
Según cuenta el guarda del refugio, David Bautista, los pilotos de Protección Civil de Castilla y León y de la Guardia Civil, que llevan a cabo los rescates en este lugar, aseguran que es muy difícil aterrizar en la pequeña plataforma del refugio. De hecho, hace ya tiempo que se proyectó construir una plataforma alejada del refugio, pero el plan nunca prosperó.
