Sébastien Berthe cruzó el Atlántico en velero durante los últimos dos meses y medio de 2021, cruzó Estados Unidos en furgoneta de este a oeste para llegar a California y se plantó en Yosemite con el Dawn Wall entre ceja y ceja. Casi tres meses de trabajo en la línea de Tommy Caldwell y un intento fallido de 23 días fueron suficientes para él. Decidió entonces dedicarse a otras vías de El Capitan: primero, escaló Golden gate en libre y en estilo cordada con Soline Kentzel; a continuación, se fijó en El Niño, que escaló también en libre, y esta vez en el día yendo de primero en todos los largos.
Intento a vista/al flash
La osadía de Seb Berthe cuando se trata de afrontar vías largas duras y líneas extremas de big wall no tiene límites. En realidad, no se había planteado ir a por una de las vías más duras de escalada libre de El Capitan sin haberle puesto ni un solo dedo encima anteriormente. Pero así fluyó la cosa:
Intentar escalar en libre a vista/al flash y en el día en El Capitan era un sueño para mí desde hacía tiempo, pero ni tan siquiera me atrevo a calificarlo como un objetivo. Así y todo, dos días atrás me di una oportunidad, fui ‘a muerte’ y me quedé verdaderamente cerca de encadenar a vista/flash El Niño, con su variante en libre.
Las dudas entre “a vista” o “al flash” radican en el hecho de que Seb Berthe había visto algunas fotografías y breves vídeos de la ruta, y también sabía dónde se encuentran sus secciones clave. Como es bien sabido, una escalada realizada estrictamente a vista exige un total desconocimiento de la vía.
Escalada nocturna
La aventura de Seb Berthe en El Niño se mantuvo en los parámetros de “a vista/al flash” durante 22 largos. “Escalé con un gran flow y pude resolver al flash o a vista todos los largos hasta el L23 – Eismeer, el último 5.13 duro”, explica él mismo.
En realidad, el Eismeer (8a/+ según su propia estimación) es una alternativa más dura y muy a bloque para el largo conocido como Lucy is a Labrador (7c+), que el belga se encontró mojado. “Luché duro, pero no pude sacar la secuencia en mi intento a vista y caí”. Unos intentos más tarde, consiguió encadenar la tirada.
Sin embargo, todavía tenía en mente el realizar una ascensión sin caídas. Así pues, rapeló de nuevo hasta la R22 y, ya de noche y a la luz de su linterna frontal, lo intentó también por el largo Lucy is a Labrador que, mojado como estaba, tampoco le permitió escalarlo sin caerse.
Finalmente, volvió a subirse por Eismeer y completó la vía sin más contratiempos hacia las once de la noche, 17 horas después de haberse metido en la pared.
Historia de la vía
La primera ascensión de El Niño correspondió a los hermanos Alex y Thomas Huber en 1998, aunque incluyó un paso de artificial para superar una breve sección lisa de 7,5 metros. Hubo varias repeticiones, entre ellas la de los hermanos Pou de 2003.
En 2018, el canadiense Sonnie Trotter abrió junto con Alex Honnold una variante de tres largos denominada Pineapple express, que permite superar ese tramo liso y completar la vía íntegramente en libre. El mismo Sonnie Trotter firmó la primera ascensión haciendo cordada con Tommy Caldwell, en un esfuerzo de 13 horas. En 2019, Alex Honnold y Brad Gobright realizaron la segunda ascensión.
- Etiquetas: El Capitan, El Niño, Sébastien Berthe