La joven Laura Rogora sigue demostrando que es una de las escaladoras más en forma del panorama internacional. Y es que mientras se pone a punto para la cita olímpica de Tokyo 2020, para la que ya tiene la plaza asegurada, la italiana ha continuado encadenando duros proyectos en la roca. El último ha sido Corvo Morto en Ferentillo (Italia), del que ha realizado la primera ascensión proponiendo 8c+/9a.
“Probé esta ruta varias veces el año pasado, pero hoy todo me pareció más fácil y en mi segundo pegue pude chapar la cadena de este proyecto. No estoy segura respecto al grado, un duro 8c+ o un 9a fácil. Esperaré la opinión de futuros escaladores”, comentó la escaladora romana, que en los últimos días tachó también otras líneas como Die hard 8c o So sexy 8a+ en la escuela ubicada 100 km al norte de la capital.
A sus 18 años, Laura cuenta ya con cuatro vías de 9a. La primera llegaría cuatro años antes con Grandi gesti en Sperlonga, aunque posteriormente fue decotada a 8c+/9a. Después llegaron Joe-cita en Oliana en 2017, Esclatamàsters en Perles y Réveille-toi en Collepardo en 2019. En este 2020 ya se hizo con uno de los primeros novenos del año en La bongada, un encadene que llegó tan solo un día después de escalar a vista con L-mens 8b+, una de las vías más duras sin ensayar realizadas por una mujer.
Además, la subcampeona de Europa de Dificultad 2019 cuenta también con varias líneas que, como Corvo Morto y Grandi gesti , están en el 8c+/9a. Se trata, por lo menos, de Pal norte en Margalef y de dos primeras ascensiones que realizó en Collepardo: La Gasparita y Sitting bull.
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