Uno de los más grandes exponentes de la escalada deportiva del mundo, Patxi Usobiaga, ha tomado la que es, probablemente, la decisión más difícil de su vida como deportista profesional. El vasco anunciará mañana en una rueda de prensa su decisión de abandonar la competición de forma definitiva.
Usobiaga llevaba un año y medio luchando contra una hernia discal que no le dejaba escalar sin dolor; hace poco más de una semana, el de Eibar relataba en su blog que “me he dado cuenta de que por ahora no puedo escalar, incluso haciendo vías largas y fáciles se me carga el cuello”. De hecho, el propio Usobiaga reconocía, también en su blog, que “llevo más de dos meses sin ponerme los pies de gato”.
Fue en junio de 2010 cuando Usobiaga sufrió un accidente de tráfico que le produjo las dolencias en las cervicales que lo han mantenido prácticamente parado durante casi dos años. En una entrevista concedida a Desnivel hace unos meses, el eibarrés se mostraba cauto de cara a su reaparición, asegurando que “nadie se arriesga a darme una fecha, porque una hernia discal es algo muy relativo, que puede ser un mes o puede ser toda la vida. Así que por eso nadie se arriesga a decirme un espacio de tiempo”. Finalmente, se han hecho realidad los peores presagios que vaticinaba el propio Usobiaga.
Esta difícil decisión deja a la escalada deportiva mundial sin uno de sus referentes, ya que Usobiaga ha conseguido grandes logros a lo largo de su carrera, como el primer 8c+ a vista así como las Copas del Mundo de 2006 y 2007 y el Campeonato del Mundo de 2009, su último gran triunfo en la más alta competición.
A pesar de que la retirada aún no ha sido anunciada de forma pública, Usobiaga ya tiene claro qué actividad sustituirá a la escalada, y no es otra que el surf; “eso es lo que llevo haciendo desde hace dos meses, nada más y nada menos, ya que, aunque parezca raro, la hiperextensión del cuello en la tabla no me bloquea el cuello como lo hace la contracción muscular que necesito para escalar. Y además es algo tan nuevo que es un todo por descubrir, es una sensación impresionante, una evolución constante y un querer aprender y un fanatismo similar al que con 10 años siendo un niño sentí por la escalada”, asegura el vasco en su blog.