Lukasz Dudek y Jacek Matuszek son dos sólidos escaladores polacos de big wall que en 2013 iniciaron un proyecto denominado Alpine Wall Tour y consistente en extender la famosa Trilogía Alpina escalando las más duras vías largas de los Alpes. Aquel mismo 2013 escalaron la mítica vía de Thomas Huber End of silence (350 m, 8b+). En 2014 se centraron en la creación de Stefan Glowacz Des kaiser neue kleider (300 m, 8b+) en el 20º aniversario de su primera ascensión. A principios de verano de 2015 realizaron la primera repetición de Brento Centro (900 m, 8b), la línea de David Lama y Jorg Verhoeven en la cara oeste del Monte Brento, para a continuación resolver en una semana Silbergeier (200 m, 8b+) de Beat Kammerlander y Bellavista (500 m, 8b+) de Alex Huber.
La vía de los españoles
Para este verano de 2016, Lukasz Dudek y Jacek Matuszek se marcaron como objetivo la vieja y olvidada vía que Much Mayr estuvo liberando en la Cima Grande mientras ellos se batían con Bellavista en el Cima Ovest. Se trata de la apertura que en 1977 realizaron Miguel Ángel Gallego, Juan Carrillo, Mariano Lozano y Antonio Gómez de la Directa española (o Via degli Spagnoli) a la Cima Grande de Lavaredo (2.999 m). La línea en cuestión consta de 13 largos escalados originariamente en artificial y no fue repetida hasta 2003. En aquel entonces, Mauro ‘Bubu’ Bolé consiguió escalarla casi toda en libre, aunque le quedaron por solucionar tres pasos de A0 en el largo más difícil, el L3 de techo, en el que ya había forzado hasta 8a+. Fue la época en que Bubu liberó otras clásicas del macizo como la famosa Camillotto Pellesier.
Pero después de su paso por ella, la Via degli Spagnoli volvió a descansar, alejada del mundanal ruido. Los más afamados escaladores en libre se sentían más atraídos por la Cima Ovest, donde Alex Huber trazó Bellavista y Pan aroma, y si alguien se decidía por la Cima Grande, la Camillotto Pellesier o la Comici Dimai eran opciones preferentes. Pocos escaladores se han dejado caer en estos años por la línea, con un techo muy complicado y una serie de presas permanentemente húmedas.
Hasta que el austriaco Much Mayr, compañero habitual de cordada de Hansjörg Auer, se comenzó a interesar por la Via degli Spagnoli al escuchar con qué pasión hablaba de ella Mauro ‘Bubu’ Bole, quien destacaba su exposición, sus seguros oxidados y ese techo que para él era imposible de liberar. Much Mayr lo logró, cotando ese largo en el 8b+ u 8c.
Tres intentos
Lukasz Dudek y Jacek Matuszek se metieron por primera vez en la vía a mediados del pasado mes de julio y ya pudieron comprobar cómo las gastaba la Via degli spagnoli: «Era más que sorprendente escuchar a Jacek resoplando, gritando y rugiendo mientras escalaba el largo inicial de 6b+», señala Lukasz Dudek, quien minutos más tarde era quien resoplaba, gritaba y rugía en ese mismo largo, una buena introducción de lo que es la vía y su cotación. «Afortunadamente, resultó que el largo más duro de 8b+/c tenía un carácter más deportivo, con movimientos largos y un severo desplome; es un largo espectacular y, aunque su protección consiste en chapas oxidadas, hay muchas de ellas», añade.
Después de tres días de trabajo en la vía y uno de descanso, se lanzaron a por el intento desde abajo. Sin embargo, la amenaza de una tormenta tras haber superado el largo clave, motivó que abortaran la misión y regresaran a suelo firme.
A mediados de agosto, Lukasz Dudek quiso intentar aprovechar una breve ventana de buen tiempo y viajó a la Cima Grande con Jaroslaw Kluf. Esta vez, él fue de primero todos los largos y los fue resolviendo con eficacia hasta superar el techo. «Alcanzamos el penúltimo largo de 6a después de la puesta de sol», cuenta Dudek, que añade que «estaba de pie en una repisa tratando de leer la vía en vano y agarré una roca por encima de mí para subir un poco. Estaba completamente suelta y empecé a caer con ella y, después de un enorme péndulo, golpeé la pared con mi coxis«. Aquel fue el punto final del intento.
Tras un par de semanas en Polonia recuperando la movilidad y olvidando el dolor, Lukasz Dudek y Jacek Matuszek regresaron una vez más a Dolomitas para enfrentarse a la Via degli spagnoli a finales de agosto. Los dos escaladores fueron alternando largos y ambos encadenaron el largo clave. Esta vez, y a pesar del cansancio acumulado, consiguieron dejar atrás todas las dificultades y alcanzar la cumbre de la Cima Grande a las tres de la madrugada.