Hace ya años que los hermanos Iker y Eneko Pou viajan por medio mundo como una especie de embajadores del psicobloc. De la mano de Red Bull, lo habían practicado ya en Mallorca 2008, Colombia 2010, y Brasil y Turquía 2011. Este mes de diciembre, el objetivo estaba situado en la Patagonia chilena y, según reconocen los escaladores alaveses: “De todos los eventos de esta especialidad que hemos realizado, este con difefencia ha resultado el más duro, ya que hemos tenido que soportar temperaturas del agua de 6ºC, frío (9ºC de máxima y -2ºC de mínima), mucho viento como corresponde a la Patagonia y nevadas todas las noches”.
El lugar elegido para el evento eran las espectaculares Catedrales y Cavernas de Mármol, monumento histórico nacional chileno situado en el lago General Carrera (Lago Buenos Aires para los argentinos). Los Pou y el resto de participantes en este Red Bull Psicobloc (los locales Jesús González, Facundo Langbehn, Blas Sepúlveda y Gabriela Sandoval) instalaron su base en el pueblecito de Puerto Río Tranquilo, desde donde se movían en barcas para desplazarse hasta la roca y escalar.
La crónica del evento
El primer día, bajo un tiempo desapacible y chispeando, los escaladores se desplazaron hasta los monumentos históricos nacionales de Catedrales y Cavernas de Mármol, “un lugar precioso con vías de muy buena calidad de hasta 20 m”, señalan. Allí, descubrieron lo duro de practicar psicobloc en esas condiciones: “Las primeras caídas rápidamente nos hicieron ver lo que se nos venía encima, varios segundos sin poder coger la respiración en el agua, en un estado de semi-shock que casi no te dejaba asimilar ni en qué dirección tenías que nadar camino de la barca”. La tarde, con la llegada de algunos rayos de sol, permitieron una escalada algo más agradable.
La fuerte lluvia apenas permitió actividad durante la segunda jornada. Sólo al final del día, Facundo Langbehn y Blas Sepúlveda desafiaron a las condiciones y, arriesgándose a una pulmonía, probaron durante unos minutos la vía de la final.
El tercer y último día, por fin salió el sol y los escaladores pudieron redimir parte de sus penas escalando tanto las placas como la vía de la final, ambas de 20 metros. En cualquier caso, siempre con frío y con el agua helada esperándoles abajo.
“Una vez finalizada la actividad, entre todos elegimos un ganador, que fue el más joven, Facundo Langbehn, que además de ser el que más subió también resultó el más combativo”, comentan los Pou, aunque precisan que “como ya suele pasar en los Red Bull Psicoblocs, el ganador es puramente anecdótico, ya que el espíritu del encuentro siempre es pasar unos buenos días de psico explorando y abriendo nuevas zonas e introduciendo a los participantes a esta excitante especialidad”.