La llegada del frío a Catalunya parece haber servido de detonante para que los escaladores nórdicos destaquen con sus encadenamientos. Noruegos y suecos han hecho de Santa Linya si principal centro de operaciones, con varias realizaciones destacadas en los últimos días.
La primera en destacar fue la joven sueca de 19 años Matilda Söderlund, pupila de David Macià. Después de quedar segunda en la última prueba de la Copa de Europa Juvenil en Kranj (Eslovenia) a finales de noviembre, inició su periplo en Santa Linya escalando al flash Santa Linya 8b y Ruta del sol 8b. Antes de dar por finalizada su visita a la cueva ilerdense, se lanzó a por un objetivo de mayor calado, y salió también airosa, al encadenar Rollito Sharma 8b+ al segundo intento. Antes de este viaje a Catalunya, Söderlund sólo había encadenado un 8b en su carrera, Jai dum en la escuela de Railay (Tailandia), a donde tiene previsto regresar para pasar este Fin de Año.
Seguidamente, la noruega Hannah Midtboe, hermanísima de Magnus, regresaba una vez más a una de las escuelas que mejor conoce para encadenar más duro que nunca. La primavera pasada, Hannah ya estuvo en Santa Linya, donde se hizo con su primera vía de 8b gracias al encadenamiento de La mare del tano en marzo. En abril, repetiría grado en la cueva con La ruta del sol, mientras que en mayo se trasladaba a Rodellar para hacerse con Espirit rebeld 8b. A finales del mes pasado, regresaba de nuevo a la cueva de Santa Linya para adjudicarse Santa Linya 8b… pero el premio gordo le llegó con anticipación el 18 de diciembre, con el encadenamiento de Fabelita, el primer 8c que figura en su libreta –en la que no hay ningún 8b+ todavía.
Magnus Midtboe, en el noveno grado
Sigue, pues, los pasos de su hermano mayor Magnus Midtboe, uno de los escasos escaladores capaz de encadenar 9b, grado que consiguió el año pasado al hacerse con la línea híbrida de Dani Andrada en la cueva de Alí Babá de Rodellar, Alí hulk extension sit start.
Pero este año el mayor de los Midtboe no se ha encontrado tan a gusto escalando como otras veces y, según confiesa en su blog: “Esta temporada de competiciones empezó increíble, pero terminó horrible; he estado reflexionando sobre lo que pudiera haber hecho mal y me temoq ue no tengo una respuesta”, señala. Después de la última prueba de la Copa del Mundo celebrada en Barcelona, se quedó por Catalunya a escalar con el campeón austriaco Jakob Schubert y los japoneses Daisuke Konishi y Sachi Anma. Mientras Schubert y especialmente Anma conseguían grandes encadenamientos en Oliana, él confirmaba su baja forma. Una baja forma relativa, a la vista de sus encadenamientos de esos días: Marroncita 8b+ a vista (para él 8b) y Picos pardos 8b+ al flash (para él 8b, también).
Unos días más tarde, regresaba a Santa Linya, que según dice es una de sus escuelas favoritas y donde logró su primer 9a+ con La novena enmienda en 2008. Y al segundo día contradice todas sus argumentaciones sobre la falta de fuerza al encadenar Fuck the system 9a: “Me sorprendí a mí mismo”, escribía en su blog, “había intentado la vía brevemente cuando estuve aquí hace un par de semanas y entonces me pareció que me llevaría mucho más tiempo. Parece que el tiempo que he estado descansando en casa me ha ayudado. ¡Ahora estoy listo para intentar algo más duro!