Alrededor de 70 escaladoras se reunieron este fin de semana en Riglos, donde bajo el mandato de sus agujas tuvo lugar el primer Encuentro Nacional de Escaladoras, gestionado por la sección Mujer y Deporte de la FEDME, e inaugurando así una propuesta que ha de llevar un poco más allá a la escalada femenina de nuestro país.

Para empezar, la guardería se llenó, con una decena de niños que aguardaron pacientemente mientras su madres le daban a la cuerda y el conglomerado de los célebres Mallos. «La idea fue un éxito», comenta Sonia Casas, una de las impulsoras del encuentro.
El número de asistentes fue creciendo a medida que pasaba el fin de semana, llegando al centenar durante las proyecciones ofrecidas por Leire Aguirre y Cecilia Buil. «Ambas fueron muy bien recibidas por las participantes, que las encontraron muy motivadoras», continúa Sonia. Cecilia y Leire correspondieron dicha acogida compartiendo cordada con las escaladoras venidas de País Vasco, Navarra, La Rioja, Madrid, la Comunidad Valencian, Cataluña y Aragón.
Aunque el tiempo empañó las escaladas y le quitó brillo a la actividad principal, aún se consiguieron escalar varias vías de los mallos pequeños (Colorado, Aguja Roja) y algunas otras en el Frechín, Visera o Pisón.
La edad de las escaladoras y el nivel técnico fue bastante heterogéneo («vinieron escaladoras de competición deportiva, las pres-seleccionadas al primer Equipo Nacional Femenino de Alpinismo, veteranas, jóvenes que empiezan…»), lo que permitió compartir e intercambiar impresiones y que aquellas con mayor destreza tuvieran la oportunidad de ofrecer sabios consejos y trucos. «Sobretodo las veteranas agradecieron la oportunidad de poder acudir a un encuentro como éste y lo encontraron muy positivo».
Jose Luis Rubayo, vicepresidente de la FEDME, quien acudió al evento, felicitó a las organizadoras de la Comsión Mujer y Deporte, por la originalidad de la idea y por la gestión global del encuentro y mostró sobretodo su apoyo al mismo y la continuidad de apoyo en futuros encuentros.
«El número de participantes que acudió al encuentro demuestra el interés y la importancia que las mujeres le conceden a este tipo de iniciativas, así como una actitud abierta para trabajar en nuevas líneas que fomenten e incrementen la participación del público femenino en este deporte. Sobre todo lo que las chicas apreciaron en mayor medida, fueron la posibilidad conocer a otras mujeres y el buen ambiente que se vivió durante el fin de semana», explica Sonia.
Como guindas del encuentro se disfrutó de una fiesta amenizada por la música de Nacho Cinto, hijo del escalador Ignacio Cinto, que tuvo lugar el sábado por la noche en las escuelas municipales de Riglos, debido a la lluvia. Durante la fiesta, que transcurrió con un ambiente formidable, se vieron las cariocas luminosas de algunas voluntarias, que «hicieron las delicias de todos con un espectáculo de luz y música animando un montón».
Y la otra guinda la puso el domingo por la mañana el reconfortante chocolate casero hecho por Pilar, madre de Toño Carasol, del emblemático Bar el Puro, que han visto pasar por los Mallos a todas las generaciones de escaladores, y quien no pudo evitar emocionarse al ver a tanta mujer junta.
Los premios y regalos, que fueron muchos, llegaron gracias a la colaboración de los comerciantes de Riglos y Ayerbe, con productos típicos como aceite, vino, setas y trufas, por mencionar algunos de Casa Ubieto, así como un lote compuesto de camiseta térmica y bolso/monedero que se entregó a cada una de las participantes, gracias a Inesca, reconocida marca zaragozana que demuestra así su apoyo incondicional con productos de línea femenina. También se sortearon sacos y mochilas cedidos también por Inesca.
Al final del encuentro se entregó un cuestionario anónimo para recabar la opinión de las participantes y poder evaluar y mejorar para las próximas ediciones. Del mismo también salen nuevas propuestas a desarrollar.
Concluye Sonia: «El resultado del encuentro se ha valorado como un éxito rotundo por la Comisión Mujer y Deporte de la FEDME y agradecemos a todas las participantes una vez más su participación y colaboración, ya que sin todas ellas, este no hubiera sido posible. También agradecemos la colaboración del Ayuntamiento de Riglos, El refugio de Riglos, Bar el Puro, ya que ofrecieron sus servicios e instalaciones para desarrollar el evento, así como a Inesca, Movement, Casa Ubieto y comerciantes de Ayerbe y Riglos por su patrocinio, y a la FEDME y CSD, ya que sin su indudable ayuda y apoyo, tampoco hubiera tenido lugar. La Comisión ha aprendido con esta primera experiencia un montón de cosas y nos ha dejado ganas de seguir mejorando y seguir adelante, repertir la experiencia y promover nuevas actividades en un futuro cercano».