El escalador alavés Adolfo Madinabeitia ya se encuentra perfectamente estáinstalado a los pies de la Torre Sin Nombre. Tanto, que además de haber montadoel campo base, gracias a su incansable trabajo y el de tres porteadores dealtura, ha subido ya a la base de la pared (5.100 m), donde ha dejando undepósito de material al pie de la Piola al Pilar oeste (1.100 m, 6c/A4),su línea de ascensión.
Las condiciones meteorológicas han sido favorables a su llegada a lasCatedrales de la Tierra, lo que ha facilitado su rápida progresión. Tanto, queAdolfo fijaba para ayer (13 de julio) el inicio de su solitario intento a laTorre Sin Nombre, que sería, de culminarse, la primera ascensión absoluta sincompañía a esta estética cima del Karakorum. De momento, si el tiempo lopermite, el alavés entraría por dos tiradas de 6b/A2 y 6a, que le llevarían afijar cien metros de cuerda, hasta la repisa donde plantará la hamaca delprimer campamento en pared.
Espera en el base

Peor suerte con el tiempo han tenido los grupos ya instalados desde hacedías en el Trango, como Araceli Segarra y Héctor Ponce. Su última crónica (7de julio) sólo reseñaba lluvia y más lluvia, y el consuelo de portear, en loposible, todo su material al Campo 1 para lanzarse hacia arriba en cuanto elcielo lo permitiese.
Araceli y compañía han elegido la ruta Eslovena (sepensaron tentar a Eternal Flame), línea algo más asequible (1.200m,6c/A0), abierta por Cankar, Knez y Wilz en el 87.
Amin Brakk comprometido

El grupo ruso liderado por Valery Rozov que abra vía en la oeste del AminBrakk también está sufriendo las oscilaciones meteorológicas, porque cuandoaparece el sol, los problemas siguen viniendo de arriba. Su último comunicado(5 de julio) asegura que cuando los rayos solares comienza a caldear la pared,comienzan los desprendimientos de hielo y roca, y aseguran los rusos que»la sensación es como estar bajo un bombardeo».
Y es que, más que por la dificultad técnica, la nueva vía rusa se estácaracterizando hasta el momento (9 largos abiertos hasta el pasado 5 de julio)por el alto compromiso y peligro que están asumiendo Rozov y compañía. Riesgoque además parece imposible de evitar tomando alguna línea más segura, pues aambos flancos de su ruta de ascenso sólo hay pared lisa y desnuda. Así que, demomento, sólo les queda confiar, afirma, en que por arriba aumente la riquezade relieve y rugosidades, y con ella la posibilidad de buscar alternativas…
Fuente: mendiaketaherriak.com,aracelisegarra.com y mountain.ru