Las Tres Cimas de Lavaredo se alzan espectaculares e imponentes en plenos Dolomitas. Sus muros de piedra vertical presentan interesantes desplomes que han conducido a importantes escaladores a trazar líneas de alto nivell en ellos. El alemán Alex Huber lo hizo al menos con dos de esas vías: Bellavista (liberada en 2001) y Pan Aroma (en 2002), que se dibujan en la desplomada pared de la Cima Oeste.
Y este verano ha llegado a la zona su compatriota de Rosenheim (Baviera) Helmut ‘Heli’ Kotter para encadenar ambas vías de una tacada. Primero se enfrentó a Bellavista, una vía que originalmente fue cotada en 8c, pero que desde que fue abierta ha sido decotada debido al engrandecimiento de algunas de sus presas.
Con esta vía bajo el brazo, ‘Heli’ Kotter se fue a por Pan Aroma, que comparte los primeros largos con Bellavista para desplazarse después hacia la izquierda. La clave de la línea es el fenomenal techo de más de 40 metros que exige los movimientos más complejos. La salida es por la clásica vía Cassin. En total, diez largos de una dificultad máxima de hasta 8c.
A señalar que a sus 27 años, Kotter es un potentísimo escalador, que ha conseguido encadenar vías de extrema dificultad en su escuela favorita de Schleier Wasserfall, como Mongo 9a, Die erbe der väter 8c+ o Reality check 8c+.
Pocas repeticiones
Las dos vías de Huber no contaban con demasiadas repeticiones hasta la fecha. De hecho, Pan Aroma no se había repetido en ocho años, hasta que el austriaco Hansjörg Auer se hiciera con la primera repetición la semana pasada. Bellavista, por su parte, ha recibido algunas visitas más, como la de Mauro Bole ‘Bubu’, quien obtuvo la primera repetición en septiembre de 2002.