‘La montaña me ha dado dos de las cosas más importantes que el hombre pueda desear: salud y amistad’. Con esta cita de Edward Whymper iniciaba AndrésFernández un interesante repaso de su trayectoria como montañero ante una generosa audiencia que no quiso perderse esta segunda entrega del Ciclo deEscaladores Madrileños que cada miércoles se celebra en la Librería Desnivel.
Tras presenciar la proyección de este madrileño de pura cepa resulta evidente que su amor por la montaña va más allá de la simple atracciónpor el elemento rey de las alturas: la roca. ‘la montaña no sólo son paredes, no sólo es roca y hielo, sino también todo lo que la rodea’. Y esose iba notando a medida que desfilaban ante nuestros ojos las diapositivas cuidadosamente seleccionadas: instantáneas de la fauna, pero sobre todo deesa flora que inconscientemente da vida al escenario alpino por el que se mueve el montañero, se alternaban con otras más directamente ligadas a lapropia actividad del montañismo. Y digo montañismo porque a menudo solemos confundir al montañero con el alpinista o el pirineista. AndrésFernández, él, es un montañero, un amante de la montaña en su totalidad.

La Pedriza para empezar
El recorrido planteado por Andrés Fernández arrancó en la Pedriza, ese lugar tan caótico, tan especial para cualquier escalador, y en el queAndrés perfeccionó su técnica de escalador. ‘El que aprenda a escalar en la Pedriza podrá escalar en cualquier lugar del mundo’. Y es que en laépoca de las botas duras, los mosquetones de hierro y de los seguros ‘psicológicos’, subirse por unas piedras tan complejas técnicamente comodifíciles de proteger sólo podía hacerte mejor escalador… o intimidarte lo suficiente como para no regresar a ellas jamás.
Después tocó hablar de las graníticas Cabrera, Gredos y Galayos. La primera diapositiva de la serie -éstas estaban ordenadas no de forma cronológicasino geográfica- proyectaron la imagen de un joven Andrés rapelando según la técnica ideada por el grandísimo Comicci: la cuerda pasa primero porun mosquetón atado a la cintura y después por detrás del hombro, un sistema menos ‘doloroso’ que el inventado por Hans Dülfer, que tenía elinconveniente de dejarte la pierna bien quemada… ¡menos mal que se inventó el ocho! Las fotos seguían desfilando y los cambios técnicos en elmaterial llamaron la atención de los presentes: el arnés de pecho y de cintura, que ‘por mucho que se perfeccionaran siempre te dejaban patas arribacuando te caías’, los cascos -su primer casco fue uno de moto- las botas rígidas que poco a poco fueron dejando paso a las famosas Paragot Adherencey Galibier Contact… No cabe duda de que la década de los setenta trajo consigo aires de revolución en cuanto a evolución de material y técnicasde escalada se refiere…
Del Eiger al Kilimanjaro
Tras repasar sus experiencias en otras zonas tan representativas del montañismo español como son Picos de Europa, Terradets o Pirineos, llegó elmomento de recordar los innumerables viajes realizados por los cinco continentes. Comenzando por los Alpes, donde Andrés escaló el Mont Blanc porprimera vez a principios de la década de los sesenta y a donde regresaría repetidas veces atraído por sus emblemáticas cumbres, entre ellas elEiger y el Cervino. Eso sí, ‘sólo para hacer hielo, porque roca ya tenemos de sobra cerca de casa’.
Después llegaron los viajes al continente africano, con unas breves incursiones en el Atlas de Marruecos (donde subió al Toubkal), Jordania, yTanzania, donde vivió una épica aproximación de dos días, sin nada que comer, todo para satisfacer su deseo de no subir al Kilimanjaro por lanormal.
La proyección concluyó con unas bonitas fotografías sobre el Machu Pichu, sus gentes, su civilización, su flora… pero, al igual que hizodurante todo el tiempo que duró su exposición, en ningún momento llegó a abordar el tema de los números, las primeras o las estadísticas. Yahabía avisado al comienzo de la proyección, ‘las montañas son algo más que roca y hielo’.
Álbum de fotos de Andrés Fernández>>
El próximo miércoles 2 de octubre, tercera entrega del Ciclo de Escaladores Madrileños de la mano de Salvador Rivas. Será a las 19:00 horas en la Librería Desnivel.