La penúltima prueba de la Copa del Mundo de Escalada de Dificultad 2018, disputada el pasado fin de semana en Wujiang (China) ha terminado siendo la definitiva para coronar a los nuevos campeones del circuito… O no tan nuevos: tanto el austriaco Jakob Schubert como la eslovena Janja Garnbret se adjudican su tercer título de campeones de la Copa del Mundo de Dificultad y lo suman al del Campeonato del Mundo en clasificación Combinada de este mismo año.
Vale la pena reseñar que la prueba de Wujiang se tuvo que decidir por los resultados de las semifinales, puesto que la lluvia convirtió el plafón en impracticable mientras se disputaban las finales femeninas, así que la ronda fue suspendida. Así las cosas, Romain Desgranges se llevó la victoria en categoría masculina, mientras que Janja Garnbret compartió primer puesto en el podio con la coreana Jain Kim en categoría femenina.
La regularidad de Jakob Schubert
Jakob Schubert ha basado su victoria en esta Copa del Mundo en la regularidad. Ganar la primera prueba en Villars (6 de julio) le dio la tranquilidad suficiente para afrontar el resto del circuito de la mejor manera. Fue segundo en Chamonix (11 de julio) detrás de Stefano Ghisolfi, su principal rival este año y ocupó la cuarta plaza en Briançon (20 de julio), su peor actuación.
Las restantes tres pruebas las ha saldado con otra victoria (Arco, 27 de julio) y dos segundos puestos (Kranj, 29 de septiembre, y Wujiang, 20 de octubre). De este modo, y a pesar de que Stefano Ghisolfi también ha ganado dos pruebas (Chamonix y Kranj), todavía le ha sobrado la última cita del año para proclamarse campeón.
El campeón de la Copa del Mundo del año pasado, Romain Desgranges, ha tenido un año muy irregular, con una victoria y dos segundos puestos unidos a tres eliminaciones fuera de la final, una de ellas incluso en fase clasificatoria.
Jakob Schubert suma el título de 2018 a los que ya obtuvo en 2011 y 2014.
La tiranía de Janja Garnbret
El concepto de regularidad es muy diferente desde la perspectiva de Janja Garnbret. La eslovena ha ganado en cuatro de las seis pruebas de este año (Villars, Briançon, Arco y Wujiang) y en las dos que no ha quedado primera, ha ocupado el segundo escalón del podio. Su dominio del circuito femenino es tan aplastante que no ha permitido a otras participantes ni tan siquiera soñar con la victoria. Y eso que Jessica Pilz solo se ha bajado una vez del podio, para ser cuarta (Kranj).
De este modo, Janja Garnbret prolonga su tiranía en la Copa del Mundo de Dificultad un año más y ya van tres de forma consecutiva después de los títulos de 2016 y 2017. Prueba de esa superioridad es que ninguno de los tres años ha tenido que esperar a la última prueba para alzarse con el título.
