Defintivamente parece que las reflexiones de Daniel Woods sobre un inminente cambio de ciclo en la escalada deportiva llevan camino de cumplirse más pronto que tarde. Los encadenamientos más extremos tienen jóvenes protagonistas, cuyos límites no se terminan de intuir. Precisamente, nos acaban de llegar las noticias de dos interesantes realizaciones de noveno grado, a cargo de escaladores que no llegan a los 20 añitos. De hecho, a Enzo Oddo todavía le quedan cinco para alcanzar las dos décadas y su registro de vías de noveno grado incorpora su sexta muesca. Se trata de Víctimas Pérez 9a de Margalef, una vía abierta por Chris Sharma, con primera ascensión de Ramon Julián en 2008 y primera repetición para Iker Pou un par de meses atrás. El imberbe escalador francés describe la ruta como “una vía de 60 movimientos que se divide en tres secciones: un gran 8c+ de resistencia, 15 metros de felicidad en 6b y un paso de bloque final de 7c FB”. Oddo comenta que Víctimas Pérez “era mi objetivo número uno para 2010; he estado seis meses concentrado en esta línea”. Realmente, dedicación no le ha faltado, según cuenta él mismo: “me subí en 2009 sólo para verla, tras haber hecho Víctima del futur y no la supe entender para nada… Otra vez, me subí a principios de invierno y ya me sentí mejor, después de todas las sesiones indoor en casa”. Oddo comenta que “¡me siento bien en Margalef! La gente, el paisaje, la roca, el clima… ¡esta región es demente! El muro de Racó de la Finestra es increíble y yo lo saboreo cada vez con el apoyo de los locales!” Y a fe que le gusta la zona, porque según él mismo ha viajado a la escuela tarraconense en “cinco estancias de cinco días, y la primera de ellas consagrada exclusivamente a la vía”. Una vía que le ha costado muchísimo trabajo, dedicación y concentración pero que finalmente ha sido capaz de encadenar. Víctimas Pérez es la sexta vía de noveno grado para Enzo Oddo, tras Sankukai (Entraygues), Chocholocco (Carros), Abysse, Inga y PuntX (Déversé).

Jakob Schubert, 9a en casa
Otro joven escalador que también transita por el noveno grado es el austriaco Jakob Schubert. A sus 19 años, este habitual de las competiciones de Copa del Mundo, acaba de llevarse su segunda vía de esta dificultad con Hades 9a, en la escuela de Nassereith (Austria). El propio Schubert se excalamaba ante la aparente facilidad con la que ha conseguido el encadenamiento: “¡Un día este año! ¿Qué demonios está pasando?”… Pues parece que su estado de forma es magnífico en este inicio de temporada. De hecho, su primer 9a llegó hace dos meses en Arco, con Underground, una vía que él mismo encontraba suave para el grado y que otros escaladores habían propuesto como 8c+/9a.
Charlotte Durif aprieta
Entre las chicas, también nos llegan interesantes encadenamientos, como los de Charlotte Durif en la escuela de Les Auberts. También con 19 años, la escaladora francesa ha completado una más que fructífera estancia de tres días en la escuela de Les Auberts, donde ha encadenado 8c trabajado y 8b a vista. Durif se anotó J’accumoncelle la fatigue 8c al segundo intento. Se trata de “una línea muy homogénea en la dificultad, muy técnica, sin ninguna sección de bloque”. Ese mismo día, se llevaba además Les incorruptibles 8a, también al segundo intento. Los dos días anteriores fue el turno para los encadenamientos a vista, con Tapis volant y Pop corn, ambos 8a; Chemin de croix 8a+, y especialmente interesante Gare au hibou 8b: “Un muro corto y bastante homogéneo en continuidad y algo de resistencia, con un par de pasos técnicos y delicados”. Por otra parte, también es reseñable el primer 8b+ conseguido por la alemana Conny Matthes con Earl grey, en ‘su’ escuela de Frankenjura.