Angela Eiter continúa siendo, a sus 34 años de edad, una de las grandes referencias mundiales de la escalada de dificultad. La gran campeona austriaca, en cuyo palmarés figuran cuatro Campeonatos del Mundo, un Campeonato de Europa y tres Copas del Mundo de Dificultad, ha anunciado que hace unos meses realizó la primera ascensión más dura jamás realizada por una mujer. Se trata de Madame Ching, una vía localizada cerca de su casa en el Tirol austriaco y que se situaría en el 9b.
La pirata más peligrosa
Madame Ching lleva el nombre de la pirata más peligrosa de la historia, una ex prostituta china que llegó a dirigir una enorme flota de más de 2.000 barcos piratas durante el siglo XIX. Es pues, todo un ejemplo de éxito y empoderamiento femenino en un mundo dominado por los hombres. Una parábola ajustada a la situación de Angela Eiter en relación con la escalada deportiva.
La historia de la vía tiene mucho que ver con las circunstancias de este año 2020. En realidad, su marido Bernie Ruech la equipó ya en 2018 y la cedió a Angela la posibilidad de liberarla, como una especie de regalo. No obstante, después de empezar intentarla, la escaladora austriaca se dio cuenta de que había secuencias extremadamente duras y llegó a pensar que “quizás no era posible para mí”.
Cuando llegó la pandemia y pasó el primer confinamiento, se mantuvieron estrictas restricciones a los desplazamientos y Angela Eiter volvió a pensar en aquella línea que tenía cerca de casa. “Hice de la necesidad virtud”, confiesa, y se la fijó como objetivo:
Mis primeros pasos en ella fueron una lección de humildad. Me caí muchas veces y me sentí realmente perdida en algunas ocasiones, pero el rendimiento y algunos cambios más eficientes en mi método dieron resultado. Pude enlazar algunas secuencias y a la vez necesité menos reposos colgando de la cuerda entre ellas… hasta que finalmente toda la vía estuvo hecha. No me lo podía creer. Este fue el momento en que todo el duro trabajo finalmente valía la pena.
Según advierte la propia Angela Eiter, Bernie Ruech y ella tuvieron que afianzar algunas presas con sika durante el proceso de apertura y liberación, ante la fragilidad de la roca.
Tan difícil como La planta de Shiva
Angela Eiter ha evitado concretar un grado para la vía, aunque todos sus comentarios conducen a situar Madame Ching en el escalón del 9b:
Como siempre, me han preguntado cuál es el grado. Yo no busco un número. Adoro el desafío de escalar una vía en mis límites, pero cada vez me gusta menos hablar acerca de la dificultad. Me he equivocado varias veces. De todos modos, comparto mi estimación personal. Debido a su estilo de fuerza resistencia que se me adapta muy bien, creo que sería similar a La planta de Shiva, que hice en 2017.
Vale la pena recordar que aquel encadenamiento de la vía de Villanueva del Rosario por parte de Angela Eiter fue el primer 9b de la historia de la escalada femenina. Hasta este año, ninguna otra escaladora había vuelto a alcanzar ese nivel. A lo largo de 2020, Laura Rogora y Julia Chanourdie han seguido sus pasos, con las repeticiones de Ali Hulk extension total sit start en Rodellar y de Eagle 4 en St. Léger du Ventoux.
- Etiquetas: 9b femenino, Angela Eiter