Nació en 1998 en Berga (Barcelona), en el Prepirineo catalán. Desde pequeño, ha mamado la montaña y la escalada, de la mano de su padre Llucià Hernández, con quien dio los primeros pasos y que siempre lo ha tutelado, orientado… y asegurado. A sus 16 años, Àlex vive con pasión la escalada y demuestra una gran motivación por todo lo que se refiere a ella, tanto en su vertiente competitiva como en la roca.
Al aire libre, Àlex Hernández ha llegado a encadenar 8c+, con Mind control en Oliana. En la faceta de competición, forma parte de la selección española juvenil desde el año pasado, y hace sólo un par de semanas se colaba en su primera final en la Copa de Europa disputada en Imst (Austria), donde fue noveno. En la última prueba de la Copa de España, disputada el pasado fin de semana en Lleida, quedó primero en categoría sub-18 por delante de Pau Jover y Jerome González (ambos tienen un año más que él y son compañeros en la selección española) y terminó segundo en la clasificación general, sólo superado por Pau. Además, participó en categoría absoluta y se metió también en la final, acabando noveno.
En la última prueba de la Copa de Europa juvenil en Imst te fue bastante bien, ¿verdad?
Muy bien, muy bien. En principio son vías nada técnicas, a pila, de escalar bien y en una estructura de placa, que se me da súper bien. Me fue muy bien. Pasé eliminatorias; aunque no hice top llegué muy arriba y pasé octavo a la final. En las finales me puse un poco nervioso y estaba un poco frío, y terminé en novena posición.
¿Era tu primera final?
Sí, en la categoría sub-18 juvenil A. Es mi primer año en esta categoría.
¿Habías competido anteriormente en pruebas internacionales?
El año pasado fue mi primer año, que competí también en ese mismo rocódromo de Imst, en Edimburgo y en Noruega.
¿Cómo ves el nivel de vuestro equipo en comparación con el de los otros países?
Creo que aquí nosotros trabajamos más volumen y allí trabajan más intensidad, y se nota mucho. Los entrenadores conocen mucho las presas y todo, con lo que saben preparar mejor esta intensidad. Pero el nivel, actualmente, en este equipo es muy bueno. Están Mikel Linacisoro, Pau Jover o Jerome González, que tiran bastante.
«El ambiente en el equipo nacional es muy bueno. Allá donde vamos nos lo pasamos bien»
¿Cómo es el ambiente dentro del equipo?
Muy bueno, sinceramente. Allá donde vamos nos lo pasamos bien, nos reímos, todo súper bien.
Cuéntanos un poco más sobre ti, ¿cuándo comenzaste a escalar?
Desde pequeño, mis padres me llevaban a la montaña y a los diez años fue cuando decidí ponerme fuerte y entrenar, porque es a lo que me quería dedicar y lo que me motivaba. Me baso mucho en la roca, aunque también me motiva la competición.
«Mi padre montó la sala de escalada La Factoria, en Berga, que es donde entreno»
Comentas que comenzaste a entrenar… ¿dónde, con quién?
Empecé a entrenar en un pequeño plafón que teníamos en casa. Después, mi padre montó la sala de escalada La Factoria, en Berga, que es un rocódromo de búlder. Todos estos años he estado entrenando allí. Además, tres veces al mes vamos a entrenar con el Centro de Tecnificación en Escalada de Cataluña, que dirige David Gambús, en diferentes rocódromos.
¿Tienes entrenador propiamente dicho?
El del Centro de Tecnificación de Cataluña, que es David Gambús, y mi padre Llucià Hernández también me ayuda en roca, para elegir proyectos y tal.
¿Cómo es tu experiencia en el Centro de Tecnificación?
Sinceramente, muy buena. Me aporta mucho y puedo extraer muchas cosas de ahí. Los entrenamientos son bastante profesionales y te preparan muy bien.
«Mi máximo grado es 8c+, Mind control en Oliana, y a vista tengo algunos 8a+»
¿Cuál es tu experiencia en roca?
A nivel de grado, mi máximo grado es 8c+, que hice con Mind control en Oliana, y a vista tengo algunos 8a+.
¿Cuál ha sido tu evolución en el grado?
Con 15 años hice 8c+, con 14 8c, con 13 8b y así más o menos.
¿Dónde te gusta escalar en roca? ¿A dónde vas más a menudo?
Me encantan los sectores de Cataluña, especialmente donde hay vías largas y tienes que escalar. Si puede ser, placa, aunque si no, el desplome también me gusta, que hay que trabajar de todo. Si tengo que decirte una escuela, serían El Berguedà, Margalef, Siurana, Oliana… Son sectores de mi estilo y me van perfectos.
«Me gustan especialmente las vías de 40 metros y placa, de resistencia»
¿Tu estilo es más bien de vía larga entonces?
Bueno, vías de 40 metros y placa, de resistencia.
Hablas de la escuela de Berguedà, que es tu zona. ¿Cómo es?
Placa calcárea. Muchas vías fueron equipadas por mi padre y desde pequeño escalé allí. Se me da bastante bien.
¿Qué es para ti la escalada? ¿Cómo la vives?
Al principio, cuando empecé a escalar, era un hobby, y ahora cada día la encuentro más profesional… Me encanta. Si no escalo, me siento incompleto.
¿Cuánto tiempo le dedicas?
Normalmente, tres días a la semana entreno (martes, miércoles y jueves) y los fines de semana escalo en roca con mis padres.
¿Cuánto tiempo dedicas a los entrenamientos?
Normalmente son entre dos y cuatro horas. Depende del entrenamiento.
¿Escalas en roca con tus padres?
Sí, mi padre me ayuda en todo, me asegura…
O sea que tu padre sería como tu modelo o ejemplo de escalador, ¿no?
Sí, sí, me encanta cómo escala las placas. Al principio, yo escalaba como él, así lento y fino, y poco a poco voy mejorando cosas que pulir como la velocidad, etc.
¿Qué ídolos tienes en el mundo de la escalada, si es que tienes…?
¡Buah! Tengo muchos: Adam Ondra, no puede faltar, es impresionante lo que hace; después muchos escaladores que compiten internacionalmente; también Chris Sharma y míticos como Wolfgang Güllich, Patrick Edlinger, muchos.