Llegó el otoño y con él las temperaturas bajan y llueven los encadenamientos. Los primeros vienen de la mano de Ekaitz Maiz, que últimamente está resolviendo algunas de las líneas más duras del Norte, incluyendo su último rotpunkt, Begi puntuan (9a). Una placa desplomada de 20 metros en Etxauri, equipada por él mismo, de la que se hace con la cuarta ascensión. «Es una vía increíble, una línea preciosa que te exige la máxima precisión y los movimientos además de difíciles son super estéticos», afirmaba Ekaitz sobre su vía.
Después de Etxauri se acercó a Eulate donde estableció las segundas muescas de Ekaitza (primera de Patxi Usobiaga) y de Nafarroa, Euckal Herriaren Bihotza (primera de Iker Pou), ambas 8b+, naturales y equipadas por Ekaitz, la segunda junto a Antón Zabala. Su cosecha se completó en Rodellar, donde se apuntó dos 8a´s a vista y Aporia (8a+ de La Surgencia) también onsight.
Y en Rodellar es donde últimamente es más productiva la deportiva, sobre todo con sabor americano. Ethan Pringle no se cansa en la escuela oscense y continúa gastando hojas de su libreta, las últimas con los encadenamientos de Pequeña estrella (8b+) y Philipe Cuisiniere (8b+) al flash. Ethan ha encadenado esta semana hasta seis 8b´s o superior a vista, algo que Sean MacColl, amigo canadiense del americano ha tomado como inspiración llegando a encadenar tres 8c´s el mismo día: Hulk, al segundo pegue, Ali-Babá, al quinto y Géminis al tercero. Vías que une a los puntos rojos de Welcome to Tijuana y Pata Negra, las dos de 8c. Todo ello sin descansar de su escapada bloquera por Colorado donde se hacía con Asian, un problema de 8b+ del Parque Nacional de las Montañas Rocosas, ni del Roc Trip que le llevó hasta Red River Gorge para llevarse al flash el 8c Thanatopsis y llevarse a vista White mans shuffle (8b).
Ethan, por su parte, ha dado por concluida su visita por Huesca -sus paredes se quedan tranquilas- dándole unos tientos a las líneas de La Piscineta. Sur la route de Madison (8b) a vista, Cosi fan tutte (8a+) y Adiós Pepito (8a), ambas al flash, han sido sus últimas víctimas.
Largo, duro y de fuera
Lo más duro de la semana viene de fuera. Michael Much Mayr, lograba repetir los nueve largos de Des Kaisers neue Kleider (8b+), una gran clásica abierta en el 94 por Stefan Glowacz y situada en la región austriaca de Wilder Kaiser. La ruta se extiende por 240 metros, entre cuyos largos hay dos 8a+ y 8b+. Sin embargo no es este el rotpunkt que se lleva la palma.
Nos vamos a la zona de Rumney, en New Hampshire, por donde anduvo Vasya Vorotnikov. Allí probaba Jaws II (¿9a+?) (o Broken jaws), y le salió. Vasya invirtió 35 días repartidos en año y medio para trabajar dicha vía, originariamente llamada Jaws, hasta que se rompieron algunos agarres. Su primera ascensión la protagonizó Dave Graham a finales de los 90, y a pesar de que inicialmente era 8c/c+, el americano propuso una subida de grado, algo nada habitual en él. Así la línea, y tras las mencionadas roturas, es ahora propuesta de 9a+ por el ruso de 20 años, instalado en New Hampshire, con su familia, desde hace seis años. Estudiante de ingeniería, ha sacado el tiempo suficiente para añadir a su currículum Livin´ Astroglide (8c+), su grado ensayado más duro. Vasya asegura que no le sorprende que la gente dude de su propuesta para Jaws II, pero tras haber resuelto los movimientos más duros de The fly (9a), también en Rumney, afirma que su último encadenamiento contiene pasos de búlder más duros. El ruso añade, «Los grados duros son una invitación para los escaladores más fuertes, para que se prueben y vean hasta donde pueden llegar. Un 9a+ es un auténtico reto para quien busque algo realmente difícil».
Fuentes: Ekaitz Maiz, climbing.com, kairn.com