Cuando Ryan Nelson se va de vacaciones, hay que prepararse para una buena (ycontundente) ristra de M’s… Este joven estudiante americano ha vuelto aexprimir al máximo su parón invernal, y desde el otro lado del Atlántico nosha enviado algunas de sus últimas correrías, armado con piolets y crampones.Unas vacaciones que hace un año dejaron, por ejemplo, la cuarta ascensión de Reptile(M9+, en tres intentos) y la clásica Octopussy (hoy M7) a vista…ensólo dos años dándole al mixto deportivo.
Este invierno Ryan ha vuelto a Colorado, y en una de sus mejores zonasinvernales, Vail, calentaba motores con dos primeras ascensiones: el segundolargo de Fatman and robin, M9- que esperaba su estreno desde que PeterTakeda la equipara y resolviera su primera tirada hace ya unos añitos; y Cavegina,junto a Jared Ogden, línea de la zona de Ouray, que sigue un desplomadoescalón de roca hasta salir, por pequeñas manchas de hielo, a una afiladaaguja colgante. Para Jared y Ryan M8+, que éste último ha completado lasegunda repetición de Quazymoto, otro M9- de Vail.
Búlder con pinchos
Pero su gran proyecto invernal era algo, para él, bastante novedoso,»un compendio de todas las cosas que yo buscaba encontrar en una vía demixto esta temporada». Liquid Swords, una línea de Rifle (Colorado)a la que echó el ojo en verano, «y casi mancho mis pantalones». Asíde expeditivo se mostraba Ryan con su nueva creación, que define como «unavisión de las progresivas direcciones que podría seguir el mixtodeportivo».
Liquid Swords encierra realmente un problema de búlder con piolets,crampones…¡y crash-pad incluido! Para empezar, se estira, durante unos 13metros de techo horizontal, por una técnica grieta de diferentes anchuras, queacepta diferentes emplazamientos para los piolets, y requiere, según Ryan, lasfiguras, colección gestual y trucos propios de la «nueva generación»del mixto (lanzamientos piolet en mano, taloneos con las espuelas de loscrampones…). Superado el techo, la vía sale por un pilar que da acceso a otraquincena de metros de hielo puro y duro…pero sin cuerda. Algo así como ungran Tsunami ¡tirando de pinchos!
Sin cuerda
«La vía era muy gratificante porque ofrecía una larga escalada sobreroca y hielo, completamente libre de los apremios de una cuerda» (dichososchapajes), además de los beneficios del bloque: «podía trabajar todos losmovimientos desde el suelo. Cuando ligué toda la secuencia fue como un sueñohecho realidad, no podría haber pedido una variedad mejor de movimientos tanfluidos en este terreno tan desplomado».
¿Ir sin cuerda?… Con una primera y horizontal sección tan próxima alsuelo, Ryan pensó en Liquid Swords como un problema de bloque con finalen solo integral. Un intento, asegura, de ampliar expectativas y buscar nuevosmétodos de escalada en terreno mixto, porque confiesa encontrarse «en unpunto donde no quiero repetir vías. Este deporte me atrae porque gira en tornoa tener una idea e intentar nuevas cosas, poniendo nuevos trucos sobre la mesa.Para mí, esa es la misión ahora, ser creativo y buscar caminos hacia lasnuevas dimensiones del deporte».
Sobre el grado de Liquid Swords…»sé que es más dura quecualquier cosa que haya hecho nunca (Reptile M9+, CavemanM9+/M10-…). Tiene la sección de roca horizontal más larga que hevisto, aparte de Mushashi.Estoy indeciso porque hay muchas variaciones en la escala de grados…quizáMbubu, M11, V10…es excelente y difícil».