«Una vez más, el Camino me enseñó que nada está escrito, que hoy mismo podrían suceder cosas totalmente inesperadas y que si crees que tienes la más remota idea de lo que va a ocurrir mañana, aún no has entendido nada».
Manuscrito aterrizado en esta edición
Así dice uno de los manuscritos presentados y creemos que encierra, en parte, el espíritu de este Premio Desnivel de Literatura, que tiene algo de rutinario: cada año lo convocamos en otoño, durante el invierno va llegando algún texto, en primavera cada vez caen más manuscritos, en la recta final se colapsa el email, todo el verano nos lo pasamos leyendo, en septiembre se reúne el jurado… Y, a la vez, nunca tenemos ni la más remota idea de lo que va a suceder: cada año es una aventura, cada manuscrito una sorpresa, y de forma mágica la experiencia se convierte en una novedad constante.
Y ahora tenemos 125 novedades para amenizar los calores veraniegos. Como cada edición aterrizan de todas partes y parece que tocan temáticas variadas. Nos sigue sorprendiendo que se presenten textos de aventuras históricas y viajes a dimensiones paralelas, un poco alejados de nuestra temática, esencia y catálogo aunque, eso sí, muy entretenidos. Por supuesto hay mucha montaña, mucho viaje y muchas de las ideas que quienes escriben manifiestan acerca de su propio mundo, abriéndolo al nuestro en un generoso acto que pasa de lo individual a lo colectivo.
Y muchos de los textos, de maneras diversas y dispares, hablan de un lugar común, como relata otro de los manuscritos:
«De la montaña y sus cielos, de sus cumbres, de sus aludes repentinos, de lo que llevamos en la mochila o en la mano: ese piolet que nos para o ayuda a avanzar».
Extracto de manuscrito presentado
Seguro que para muchas de vosotras entregar el manuscrito al Premio Desnivel de Literatura es el final, de meses de trabajo o de poner a punto algo sacado del cajón; para nosotras es apenas el comienzo de un verano de lecturas y viajes.
Muchas gracias por toda la participación, la confianza y el arte.
Es un privilegio meter en la mochila 125 polizontes para empezar esta travesía llena de sorpresas, lágrimas, descubrimientos, decepciones y maravillas de todo tipo, como no puede ser de otra manera.
Os iremos contando cómo va el viaje. El destino, habrá que esperar hasta la reunión del jurado a finales de septiembre. De momento, ¡¡agárrense fuerte que vamos a despegar!!
Se presentan novelas de aventuras exóticas, porque en las bases se indica que el premio es de aventuras. Quizá deberías dejar claro que es de montaña, montaña, montaña, y (también) viajes y aventuras en la montaña. El problema es qué sabe un ciclista o un escalador de escribir novelas….