Tras algo más de dos años desde el fallecimiento de uno de los alpinistas más carismáticos de la historia del alpinismo, su país de nacimiento, Nueva Zelanda, ha decidido homenajear su figura mediante el renombramiento de la cresta sur del Aoraki, también conocido como Monte Cook, la montaña más alta de aquel país.
El pasado 10 de agosto, el gobierno neozelandés confirmaba que la recomendación, hecha por el Consejo Geográfico de Nueva Zelanda, de rebautizar la cresta sur con el nombre del alpinista había sido aceptada.
Tras la muerte de Hillary en 2008, se lanzó una campaña pública para reconocer la labor de la primera persona, junto al sherpa de Hillary, Tenzing Norgay, en hollar la cima de la montaña más alta del planeta, el Everest. De entre las siete propuestas que se barajaron, la que finalmente ha sido adelante ha sido esta.
Este hecho también ha tenido su parte de controversia, ya que es la primera vez que algo así ocurre en Nueva Zelanda y algunas voces especializadas afirmaban que otros alpinistas neozelandeses se merecían un homenaje por el estilo, como Harry Aires, destacado guía de montaña en los años 40 y 50 y que enseñó a escalar al propio Hillary.
Asimismo, según la normativa del país, para que se renombre una zona geográfica en honor a alguna persona, es necesario que exista una asociación que haya trabajado y contribuido para ello, hecho que muchos consideran cuestionable. Además, existe la posibilidad de que esa misma cresta tenga un nombre maorí –lengua indígena- que no haya sido descubierto todavía.
El pasado 18 de agosto, el cambio de nombre fue efectuado de forma oficial, si bien está por ver si es aceptado por la comunidad montañera nacional e internacional.